El ministro del Interior, Armando Benedetti, desde Barranquilla, se refirió a las mesas de diálogo que se adelantan con los jefes de las bandas criminales de ‘Los Costeños’ y ‘Los Pepes’. 

En primera medida, celebró la voluntad de negociar de estas estructuras delincuenciales, al tiempo que aseguró que este proceso permitirá reducir las cifras de sicariato y otros delitos de alto impacto en el Atlántico. 

“En Malambo, Soledad y Barranquilla han subido vertiginosamente los casos de sicariato. Se celebra con mucho entusiasmo que estas organizaciones ilegales y del crimen estén con la voluntad de negociar o empezar a establecer un diálogo para bajar todo esto de incremento en las cifras que tiene que ver con sicariato, los jóvenes y el narcotráfico”, dijo. 

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El alto funcionario indicó  que las mesas están operando y que ha sido de buen recibo y manejo, sin embargo, precisó que las negociaciones deben hacerse dentro de un protocolo que en este momento no puede ser divulgado. 

Frente a los temores que existen alrededor de  que estas mesas puedan fracasar  y surjan disidencias como en el caso de las FARC, el ministro Benedetti aseguró que eso dependerá de los protocolos para definir y hacer la paz.

Sostuvo que en este proceso, al igual que otros a futuro, no se puede repetir el modelo de los diálogos de paz ejecutados en el Gobierno de Juan Manuel Santos.

“Eso fue lo que pasó en el Gobierno de Santos. Ahí estuvo Néstor Humberto Martínez, que dañó el proceso de paz, y ahí vienen las disidencias que terminan siendo unos traquetos como son actualmente, que no tienen nada que ver con la guerrilla. Y eso es lo que no se tiene que calcar, pero sí tener como paradigma para futuros procesos”, afirmó. 

Fue enfático al decir que lo que se determine en esas mesas  debe cumplirse, en aras de que no surjan complicaciones como fue el caso actual de las disidencias de las FARC.