En el municipio de Unguita, en Chocó, murieron 12 miembros del Clan Úsuga, catalogado como la banda criminal más peligrosa del país. Los criminales murieron durante una operación llevada a cabo por la Fuerza Pública, con el apoyo de la Fuerza Aérea.

La acción fue confirmada por el general Rodolfo Palomino, director de la Policía, quien en su cuenta de Twitter dijo que la Fuerza Aérea apoyó el ataque, en lo que sería el primer bombardeo directo realizado contra esta banda criminal en el país.

El ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, también se refirió al hecho, y reveló que en la zona todavía se mantiene la operación por parte de la Policía y de las Fuerzas Militares.

La operación se dio en área campamentaria de los Úsuga, en donde se encontró evidencia de que el grupo criminal podría estar trabajando con miembros del ELN. "Estamos justo en una área campamentaria de esta estructura, en donde, de acuerdo con las informaciones, podría haber un amalgama entre el clan Úsuga y el ELN", reveló el general Palomino.

En la zona donde ocurrió la intervención se mueve Roberto Vargas Gutiérrez, alias Gavilán, el segundo jefe de la banda criminal y conocido por ser señalado como el autor intelectual del homicidio de los estudiantes de los Andes Mateo Matamala y Margarita Gómez, en enero del 2011.

Según reveló la Policía, el saldo dejado por la oepración es de cinco campamentos destruidos, 14 fusiles decomisados, una ametralladora, un mortero, cuatro granadas, tres minas artesanales, 1.269 cartuchos y 17 proveedores.

El ataque de la Policía en conjunto con la Fuerza Aérea y el Ejército, tiene mayor relevancia por ser la primera vez que se utiliza todo el poder de las Fuerzas Armadas contra una Banda Criminal (Bacrim), pues se consideraba que estos grupos no podían ser combatidos directamente por el Ejército, a pesar de que utilizan armas exclusivas de los militares y se organizan en campamentos de cientos de hombres.