En desarrollo de la sesión descentralizada de la Comisión II de la Cámara de Representantes que se cumplió este jueves en Barranquilla, el Alcalde Jaime Pumarejo y el Ministro de Justicia, Néstor Osuna, se comprometieron a dos aspectos fundamentales para reducir la inseguridad y brindarle tranquilidad a la ciudadanía.

“Se pudo escuchar de primera mano el clamor de los comerciantes y la sociedad civil, que venía pidiendo acompañamiento en temas de fondo en materia de seguridad. La primera, más jueces, y eso también lo venía pidiendo el sistema judicial porque están atendiendo en promedio 1.000 casos por juez y eso les impedía poder impartir justicia, poner a los criminales tras las rejas y darle una segunda oportunidad a quien no había cometido ningún acto criminal. Por eso celebramos el compromiso que se ha hecho el Ministro de Justicia y la Comisión II de la Cámara de Representantes”, precisó el Alcalde Jaime Pumarejo al término del encuentro.

Al mismo tiempo, agregó, “celebramos que el Ministro de Justicia haya recogido nuestra propuesta de convertir a Barranquilla en una ciudad sin armas en donde combatamos a las armas ilegales, a las personas que utilizan la violencia para amedrentar, extorsionar y robar”.

Es por eso, insistió, “que queremos con contundencia priorizar el delito de la tenencia y porte ilegal de armas y de cualquier delito que se cometa con un arma de fuego ilegal para poder ir desescalando la violencia y los crímenes en la ciudad y poder ser ejemplo de otras ciudades”.

Por su parte, el Ministro de Justicia Néstor Osuna expresó que la propuesta coincide “con la iniciativa del Presidente Gustavo Petro de tener una Colombia sin armas, que el monopolio de las armas esté en la fuerza Pública, sin violencia callejera con armas, ojalá sea sin violencia total o paz total. Comencemos por una convivencia sin armas”. 

Señaló que el dispositivo legal de la legítima defensa existe, “pero si en la convivencia cotidiana no hay armas vamos a tener una convivencia mucho más armónica”. 

Puntualizó que si solo la Fuerza Pública tiene armas, “la violencia y por lo tanto la necesidad de utilizar la legítima defensa disminuye drásticamente”.