En su discurso de apertura en el marco del Foro Global de la OCDE sobre el desarrollo local, en Barranquilla, el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, enfatizó la convicción de que el desarrollo real no puede sostenerse sin una visión de recuperación y una perspectiva global. 

El mandatario reiteró que el Atlántico ha sido uno de los primeros departamentos en Colombia en impulsar una agenda internacional no como un mero “protocolo” sino como parte fundamental e integrada de su modelo de desarrollo.

Verano de la Rosa destacó las alianzas con gobiernos como el del Gran Caribe, incluyendo Panamá, así como con universidades extranjeras y agencias multilaterales, que han permitido al Atlántico conectar lo local con lo global. 

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“Es una oportunidad histórica para reafirmar un principio en el que creemos con absoluta convicción: el desarrollo no desciende desde las alturas del poder central, se construye desde la base, desde la gente, desde el territorio”, dijo.

Añadió que, “cuando las regiones tienen capacidad de decisión, el Estado se vuelve más eficiente. Cuando las comunidades participan, la democracia se fortalece. Y cuando el desarrollo se piensa desde lo local, los resultados son más legítimos, más sostenibles, más humanos”.

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El gobernador expresó que “este foro ocurre en un momento clave. Las democracias atraviesan crisis de confianza. Las brechas sociales persisten. Los territorios enfrentan desafíos enormes: migración, desigualdad, cambio climático, desempleo, violencia, rezago digital. Y, sin embargo, desde lo local, emergen también soluciones potentes”.

Mencionó la creación de una secretaría dedicada a la internacionalización y el diseño de una política pública en materia de cooperación, siendo pioneros entre los entes subnacionales en Colombia.

“Actualmente, se trabaja en fortalecer la articulación internacional para una mayor dotación e institucionalidad en este proceso”, expresó.

La descentralización como solución y el rol de Barranquilla

El gobernador resaltó que durante décadas, los territorios del Caribe han sido percibidos como “periferias del debate nacional e internacional”. Sin embargo, aseguró que ahora están dejando de ser "escenarios para convertirnos en interlocutores. No pedimos permiso para existir: pedimos respeto para proponer”.

Verano De la Rosa hizo hincapié en la importancia de la descentralización, un principio que defendió en la Asamblea Nacional Constituyente de 1991. Para él, la descentralización no es un problema, sino una parte fundamental de la solución, ya que fortalece al Estado, la democracia y genera resultados más legítimos y sostenibles cuando las regiones tienen capacidad de decisión y las comunidades participan activamente.

En este contexto, el gobernador agradeció al alcalde de Barranquilla, Alejandro Char,  por la posibilidad de acoger el Foro Global de la OCDE, resaltando a la ciudad como una capital que ha hecho del encuentro de culturas y la transformación territorial su razón de ser. 

Afirmó que Barranquilla y el Atlántico han demostrado que el proyecto local no tiene por qué ser menor en su visión y ambición, destacando el liderazgo en la planeación a largo plazo, la inversión en educación y la proyección internacional del territorio.

“Hoy, el Atlántico levanta la voz no para exigir privilegios, sino para compartir un modelo. Un modelo en construcción, con errores y aciertos, pero con dirección. Queremos que otros territorios de Colombia y de América Latina se sumen a esta conversación. Queremos ser parte de una red de regiones que, sin arrogancia, reclaman su lugar en el sistema internacional”, indicó.

Desafíos y compromisos para el futuro

Para construir el futuro, Verano De la Rosa enfatizó la necesidad de un trabajo conjunto, articulado y coordinado entre todos los estamentos de la sociedad. 

Finalmente, agradeció a la OCDE por "llegar hacia el sur" y por elegir a Barranquilla como sede de su primer foro fuera de Europa, reconociendo la experiencia local como fuente de conocimiento y acción.

“Este foro no es un punto de llegada, sino un punto de partida. Que los diálogos que aquí se generen no queden en documentos, sino que se traduzcan en decisiones concretas. Que nos llevemos alianzas, compromisos, metodologías. Y que regresemos a nuestros territorios con renovada convicción de que el desarrollo, para ser verdadero, debe nacer desde abajo y caminar hacia afuera”, enfatizó Verano de la Rosa.