En un saludo a la XXIV Conferencia Rosa Luxemburg, el exjefe guerrillero de las FARC Iván Márquez reapareció para lamentar haber dejado las armas y cuestionó los incumplimientos del acuerdo de paz y el asesinato de líderes sociales en Colombia

"La paz fue traicionada por el Estado colombiano, que optó por la perfidia y el incumplimiento de lo pactado de buena fe. Reconocemos que incurrimos en varios errores como el de pactar la dejación de armas antes de asegurar el acuerdo", sostuvo.

Dijo que como guerrilla asimilaron el Acuerdo "como una gran Victoria en la más hermosa de todas las batallas que es la lucha por la paz", pero que en sólo dos años de vigencia, con seguimiento de misiones de naciones unidas y de organismos internacionales, los resultados en materia de cumplimiento por parte del estado son desalentadores".

Márquez sostuvo que desde ese lapso "han sido asesinados más de 400 líderes sociales del país y más de 85 guerrilleros, lo cual  afirma una prospectiva de muerte aterradora".

Para el jefe guerrillero, "el acuerdo perseguía alejar las armas de la política, pero éstas siguen siendo utilizadas para el exterminio físico de los opositores políticos; cambiaron el texto original del acuerdo de La Habana violentando el principio de toda negociación; los acuerdos son para cumplirlos, después de firmados no pueden ser modiificados".

 Y destruyeron la jurisdicción especial para la paz, la JEP, concebida para todas las partes involucradas en el conflicto.

"La verdad es lo único que puede sanar las heridas que deja el conflicto", puntualizó.

Pidió la libertad de Simón Trinidad, la de Sonia, que volvió de Estados Unidos e insistió en la inocencia de Jesús Santrich.