Estudiantes violentan sellos y puertas y se ‘toman’ Vicerrectoría de UniAtlántico
Los tomistas siguen impidiendo el ingreso de personal a la Universidad.
Violentando los sellos y puerta de acceso, un grupo de tomistas irrumpió las oficinas de la Vicerrectoría Administrativa de la Universidad del Atlántico, para proceder a la revisión de equipos y documentos oficiales.
El cuestionado episodio se registra en momentos en que la institución se encuentra paralizada por cuenta del cese de actividades promovido por un grupo de estudiantes.
Las imágenes conocidas muestran la manera como la puerta de acceso quedó con serios daños tras haber sido violentada, pese a que tenía un sello que restringía el ingreso de personal debido a la delicada información oficial que allí se guarda, tanto en documentos físicos como en los computadores.
Igualmente registran a una estudiantes provista de guantes revisando documentos, como si se tratara de una investigadora judicial. Otro estudiante, también con guantes, está al frente de un computador y un tercero, con un implemento similar, también con otro portátil.
Mientras esto ocurre, los mismos tomistas impiden el ingreso del personal a la Universidad, paralizando actividades como el pago a proveedores y de los aportes parafiscales.
Tampoco permiten el ingreso a la oficina de Admisiones para que los estudiantes puedan verificar los registros de admitidos.
En esencia, según la situación, los únicos que tienen el acceso garantizado, son los mismos tomistas.
Por la parálisis promovida por los tomistas, también se encuentran paralizados los proyectos de investigación que reciben categorización por parte de Colciencias.
Esta situación fue advertida por un docente que tiene a su cargo un grupo de investigación y quien ante la ‘mesa de diálogo’ manifestó que requería con urgencia los recursos para sustentar tres ponencias en la Universidad del Bío-Bío de Chile, con el riesgo de que si no se cumple la misión podría bajar de categoría.
“Estamos varados. Son ponencias que categorizan al grupo y esto viene con un plan de trabajo desde hace rato”, señaló el docente frente a la mesa.
Curiosamente, a su lado se encuentra una estudiante que asegura que “yo también soy ponente de un evento igual”, con lo que se creería que es otra de las afectadas por la parálisis.
Sin embargo, se trata de la misma estudiante que figura dentro de las oficinas de la Vicerrectoría Administrativa revisando documentos, provista de guantes, tras el violento ingreso a dichas instalaciones.
Mientras tanto, la Universidad sigue paralizada afectando directamente a por lo menos 46 mil personas, entre profesores catedráticos; profesores de tiempo completo y medio tiempo y ocasionales; contratistas administrativos OPS; instructores de cursos libres; estudiantes en receso; egresados con ceremonia suspendida y aspirantes a ingresar a la institución en el primer semestre 2020.