Un episodio que devela la crisis de la salud en Colombia fue hecho público por el Superintendente Ulahí Beltrán, reunido este jueves con usuarios de las EPS que tienen afiliados en esta sección del país.

En el evento, aseguró que la crisis es tal que hasta un expresidente de la Corte Constitucional, el exmagistrado Jorge Iván Palacios,  quien para la época en que se aprobó la Ley Estatutaria de la Salud, la 1751 de 2015, es víctima de este colapso.

Lo calificó como una “ironía de la vida” que un protagonista de ese marco legal, que define el derecho a la salud, hoy sea víctima del sistema con el cual se busca garantizar el servicio a la salud de los colombianos.

Este jueves cuando se desplazaba a Barranquilla, dijo Ulahí Beltrán ante los asistentes, "me llama el que era en ese momento el presidente de la Corte Constitucional (Magistrado Jorge Iván Palacios). Ese alto tribunal de la justicia que vela por la integridad de los derechos en Colombia. El que era el presidente en ese momento de la sanción de la Ley Estatutaria a que lo ayudara con la EPS porque a la esposa, no le autorizan una hospitalización en la Clínica Reina Sofía de Bogotá".

Manifestó que el magistrado Palacios, quien fue "el hombre que decidió que en Colombia existiese como fundamental el beneficio de la salud, tiene que recurrir a la Superintendencia para que a su señora se le dé la atención en salud que merece. A un exmagistrado de la República”. 

Acto seguido, se interrogó el Superintendente: "¿Qué se puede esperar para el ciudadano de a pie?".

"Por eso hago algunas claridades contra aquellos que argumentan que estamos en el mejor servicio de salud del mundo y argumentan con respaldo en encuestas que no superan las mil personas a nivel del país”. 

Beltrán manifestó no creer en las encuestas porque a diario son 4.000 las personas “que llaman a la Superintendencia pidiendo auxilio para que le salven la vida, porque estando afiliados a las EPS, no reciben la atención".

Según la Superintendencia, en el último año se han recibido 1.600.000 manifestaciones de inconformidad. De esa cifra, el 35 por ciento han sido casos de vida o muerte.