Por José Granados Fernández
Twitter: @JoseGranadosF

De acera a acera, dos hombres se mueven afanados repartiendo a los transeúntes las pequeñas hojas volantes en las que anuncian la venta de lotes en el barrio La Central de Soledad. “¿Sueñas con tener casa propia? Hoy tienes la posibilidad de hacerlo realidad”, dice el sugestivo mensaje.

En el extenso predio, localizado en la calle 65 con carrera 6, quienes forman parte de esta logística muestran a los compradores la maquinaria pesada, entre motoniveladoras, compactadoras, cargadores y buldóceres, con la que lotearon 34 hectáreas; además les ofrecen los servicios de ferretería, incluida la venta de bloques, arena y cemento, y tienen a su servicio vendedores que atienden llamadas telefónicas y explican los costos y los tamaños de cada lote en el amplio terreno donde, en pocas horas, trozaron cientos de árboles y el resto de la vegetación, como lo muestran imágenes satelitales.

Cuando los contactamos interesados en comprar un lote, una vendedora dijo que “hay lotes de 8 y 16 millones de pesos”:

 

 

En la venta de los lotes no hay financiación. Recalcó la vendedora que “solamente recibimos pagos de contado”, o sea plata en efectivo, contante y sonante.

 

 

Investigación penal 

Todo sería normal si no fuera porque, de acuerdo con el proceso 2020-51269 que desde el año pasado abrió la Fiscalía General de la Nación, se trata de un negocio ilícito que bandas organizadas, la llamada ‘Red de Tierreros de Soledad’, llevan a cabo ante los ojos de la Alcaldía, máxima autoridad territorial, que fue informada de que el predio, que desde 1994 pertenece a la familia Camacho, fue ocupado ilegalmente, con armas y bajo amenazas, durante el confinamiento por la pandemia del Covid-19.

Por la cantidad de lotes en venta, como lo señala el abogado Andrés Díaz Arana, apoderado de los Camacho, en lo que era la antigua finca Los Ángeles están construyendo, sin ningún tipo de control, una nueva ciudad sin servicios públicos, lo que agravaría el ya caótico desorden urbano que caracteriza las “Villas de la miseria” de Soledad, extensas áreas que a cambio de votos, para congresistas, alcaldes y concejales, fueron invadidas en las décadas de los 80 y los 90 y crecieron sin ningún tipo de planeación.

 

 

Tan lucrativo es este negocio para la ‘Red de Tierreros de Soledad’ que si venden esos 4.000 lotes al menor precio, de 8 millones de pesos, ganarían 32.000 millones de manera ilegal con la acción o la omisión de empleados gubernamentales.

Emisora Atlántico y Zona Cero.com conocieron pruebas técnicas y documentos, así como el resultado de pesquisas de investigadores del CTI de la Fiscalía, que comprometen a particulares y a funcionarios de Inspecciones de Policía, la Alcaldía de Soledad y la Oficina de Registro e Instrumentos Públicos. El abogado Andrés Díaz revela que todo es una cadena de falsedades y omisiones.

 

 

La escritura falsa 1902 

 

 

En efecto, el modus operandi consiste en usar documentos falsos que son registrados con la complicidad de funcionarios públicos. Por eso, además de particulares como Álvaro Santander Baca Barceló, quien a través de la escritura pública falsa 1902 del 27 de septiembre de 2006 logró inscribir como suyo el predio Los Ángeles en la Notaría Segunda de Barranquilla y en la Oficina de Instrumentos Públicos de Soledad, la investigación de la Fiscalía apunta a actuaciones ilegales de Aníbal Manjarrez Celín; a Edwar Galindo Argel y David Pérez Barbas, inspectores de Reacción Inmediata de Soledad; a David De Castro, suspendido registrador de Instrumentos Públicos, y a funcionarios de la Alcaldía que, presuntamente, pidieron parte del terreno para frenar a los invasores.

Con respecto a la escritura 1902, un estudio grafológico de la Fiscalía dictaminó que la firma de Isabel Baca Ariza -anterior propietaria del inmueble- “no es uni procedente con las muestras patrón del gesto gráfico (…) tomadas para efectos comparativos”. En otras palabras: es falsa.

En la investigación figura que la supuesta venta del predio sucedió en 2006 y sólo hasta 2018, es decir 12 años después, fue registrada por el investigado Álvaro Baca. La irregularidad descubierta consistió en que la venta la registraron en un folio de matrícula cerrado, es decir en el que no podían hacer ninguna inscripción, razón por la cual la Superintendencia de Notariado y Registro la declaró nula y ordenó una investigación interna.

Más falsedades 

La misma Superintendencia certificó, también, que la funcionaria que aparece firmando la escritura como Notaria Segunda no era la titular ni había sido encargada de ese despacho el día del trámite, en 2006.

En la cadena de falsedades, los invasores, además de la ilegal escritura 1902, presentaron dos certificados falsos del pago del Impuesto Predial. Lo hicieron con un número de matrícula que no existe, de acuerdo con la respuesta que dio la Alcaldía dentro de la investigación.

Con la escritura falsa, los reclamantes investigados lograron, inexplicablemente, el 23 de marzo pasado, un amparo policivo a pesar de que, en su momento, al inspector Edwar Galindo los apoderados de la familia Camacho le hicieron ver que se trataba de un documento ilegal. El funcionario hizo caso omiso y por el contrario declaró “perturbadores e infractores” a los verdaderos propietarios del predio.

Por “violación al debido proceso”, tres meses después, el 8 de julio, la Alcaldía de Soledad ordenó “declarar la nulidad de todo lo actuado” por el inspector Galindo al otorgar el amparo policivo en favor de Baca Barceló.

Llama la atención que la revocatoria del amparo de Galindo la firmó como alcaldesa encargada Yesenia Ocampo Barrios, secretaria de Talento Humano, y no el titular Rodolfo Ucrós.

 

Falta de autoridad y estafa masiva 

Noventa días después de la decisión de la Alcaldía, para la ‘Red de Tierreros de Soledad’ nada ha cambiado en el terreno invadido a los Camacho.

Allí, la administración municipal prohibió llevar a cabo obras civiles y construcciones o la urbanización, división y parcelación “sin la debida licencia, autorización o permiso expedido por la autoridad competente”.

Sin embargo, Emisora Atlántico y Zona Cero.com, en terreno, constataron que en las 34 hectáreas siguen haciendo todo lo contrario y la venta ilegal de lotes continúa, como si la autoridad del alcalde Rodolfo Ucrós no existiera, tanto que los invasores, a través de sus promotores, aseguran que una vez concretan la venta con un cliente les “entregamos todo legalizado en notaría”, como lo promete la vendedora.
 

 

¿Cómo pueden asegurar que legalizan la venta si tres entidades municipales competentes para estos casos les dijeron a la Fiscalía que el proyecto de urbanización es ilegal? Las curadurías urbanas 1 y 2 de Soledad certificaron, el 17 y el 19 de agosto pasados, que para el predio en mención “no han expedida licencia de urbanismo”; y el Edumas, como máxima autoridad ambiental, dijo el 12 de agosto que en ese despacho no ha sido tramitada ninguna licencia ni autorización, ni podrá tramitarse, entre otras cosas porque no es de su competencia.

Para el abogado Andrés Díaz todo lo que sucede en Soledad es producto de la ausencia de institucionalidad y la falta de autoridad frente a la ‘Red de Tierreros’.

 

 

Díaz alerta que, al margen de la invasión, por la que la Fiscalía adelanta un macroproceso por 5 delitos, que incluyen urbanización ilegal y prevaricato, para el caso de los funcionarios públicos por actuar en contra de la ley, familias de escasos recursos están comprando en La Central lotes que nunca podrán legalizar, por lo que pide a la Alcaldía de Soledad que evite una masiva estafa.