Helkin Alberto Nuñez Cabarcas (*)

 Especial para Zonacero.com

Corre el año de 1922 y Salgar, población de pescadores, se preparaba para sus fiestas patronales. Esta vez con más deseos de que llegara el día anhelado. Este antiguo puerto colonial era testigo de las correrías litúrgicas que se realizaban anualmente desde 1903, cuando los Carmelitas, Jesuitas y Franciscanos sembraron la fe en estas tierras a las misiones Marianas desarrolladas por ellos. Sus primeros feligreses veían pasar la imagen de la Patrona de Puerto Colombia y se volvían a refugiar en el Sagrado Corazón de Jesús.

La llegada de una mercancía del viejo continente, concretamente de la Península Ibérica y unas de las primeras en legalizarlas formalmente en el naciente edificio de la Aduana de Barranquilla, pone punto final para su trámite legal y es  así como el  6 de julio se daba la buena noticia que este conglomerado social tenía una nueva patrona; Santa Isabel de Portugal.

Las gestiones filantrópicas para la primitiva iglesia de Salgar  fue de una gran matrona tubareña, doña Rosa María Marimón Pereira quien con  muchas actividades en su seno familiar logró  hacer la respectiva donación, que duraría muchos meses para su traslado, los diarios locales desarrollaban la noticia y fue así como llegó la imagen a salgar.

En la sección  notas sociales del Diario El Derecho edición No. 1.830 del jueves 6 de julio de 1922 textualmente: “La distinguida señora doña Rosa María de Palacio, esposa de nuestro querido amigo don Ramón Palacio de la Torre, ha obsequiado al templo de Salgar con una bella imagen de Santa Isabel”.  

La iglesia de Salgar, estaba ubicada muy cerca de la línea férrea, factor que obligó a diseñar un espacio seguro para la bendición de Santa Isabel de Portugal el cual fue realizado el domingo 9 de julio de 1922, en solemne misa presidida por el Reverendo Padre Rafael Salazar, perteneciente a la Compañía de Jesús.

El evento fue multitudinario, llegaron misiones de diferentes sitios aledaños a San Antonio de Salgar como lo fueron del mismo Puerto Colombia y La Playa. Le seguía el gran número de invitados procedentes de la capital Barranquilla. En el transcurso del  evento religioso  se presentaron varias retretas en los  alrededores de la iglesia. De igual forma la comunidad adornó sus calles y carreras con banderas de color blanco. Por todos lados estaban los multitudinarios banderines que alegraban ese día la bendición de la nueva patrona de Salgar. 

Los actos religiosos siguieron su curso y se establece un lugar en el tempo para la nueva imagen donada. Los años suman su  veneración seguía todos los 9 de julio como efemérides de sus fiestas patronales, hasta que “llegó un curita pedante y nos cambió la fecha”, eso expreso la señora Juana, Salgareña de ochenta y cinco años donde termina el saludo “todo el que viene a Salgar le da la gana de cambiar todo”… 

Los años siguieron y uno de los primeros logros espirituales de la nueva patrona de los salgareños fue suplicarles en las jornadas litúrgicas, la suspensión de las obras de Bocas de Ceniza ya que a mediados de 1930, estas obras afectaron la zona costera , donde Salgar sufrió fuertes arremetidas del mar. Se recuerda aquella noche de septiembre finalizando la década de los 30´s, que fue bautizada por los abuelos como la “Catástrofe de Salgar”, la sedimentación acabó con varios tramos de la línea férrea derribando varios ranchos y poniendo en peligro la pequeña iglesia, la cual estaba muy cerca a la orilla del mar. 

 Pero quién fue Santa Isabel de Portugal

Isabel de Portugal, o Isabel de Aragón, nació 4 de enero de 1271, Palacio de la Aljafería, Zaragoza, España fue reina consorte de Portugal entre 1282 y 1325, fue declarada santa por la Iglesia católica. Hija del rey Pedro III de Aragón y de la reina Constanza II de Sicilia, se le puso el nombre de Isabel en honor a su tía abuela, Isabel de Hungría.

Dedicó parte de su tiempo libre a atender a los enfermos, ancianos y mendigos, para los que ella misma confeccionaba ropa. Durante su reinado ordenó construir hospitales, escuelas gratuitas y refugios para huérfanos. Ordenó la construcción de un buen número de conventos. A pesar de la poca moral católica del rey Dionisio, este sentía tanta admiración por Isabel que la dejaba llevar su vida cristiana de forma libre, hasta el punto de que la reina distribuía de forma regular las monedas del Tesoro Real entre los más pobres. Isabel siguió estrechamente el ejemplo de su ancestro Santa Isabel de Hungría, adoptando su filosofía de vida cristiana hasta tal punto que la leyenda popular portuguesa adoptó el episodio de la transformación del pan en rosas.  Murió en Estremoz el 4 de julio de 1336. 

Sus restos fueron sepultados en su convento de Santa Clara-a-Velha en Coímbra; pero al resultar este progresivamente anegado por las aguas del río Mondego tuvieron que ser trasladados en el siglo XVII al nuevo convento de Santa Clara-a-Nova.  Fue beatificada en 1526 y canonizada por el papa Urbano VIII en 1625. ​ Su festividad fue introducida en el santoral católico, celebrándose el 4 de julio, día de su muerte.

Salgar seguirá venerando sus fiestas patronales y su gran representante espiritual, es hora de reivindicar sus verdaderas fiestas y que las nuevas generaciones fortalezcan fe, devoción y mucha alabanza  por la santa de este gran corregimiento lleno de inigualable historiografía  a nivel mundial.

(*) Funcionario Archivo Histórico del departamento del Atlántico

Presidente Fundación Marsolaire.

Agradecimientos:

Mónica Galindo.

María Santiago Ripoll.

Wikipedia y Redes Sociales.