Entre los efectos económicos y sociales que dejó la pandemia, el sector turístico fue quizás uno de los más afectados por cuenta del cierre de lugares públicos, las restricciones en viajes internacionales y los riesgos epidemiológicos que enfrentaba cada país.

Los cruceros, fueron una industria que entró en declive y que no pudo operar durante este tiempo. Esta situación afectó no solo a las empresas detrás de su operatividad sino también a ciudades puerto como Santa Marta, que se veían beneficiadas por los réditos económicos que dejaban los turistas a bordo de estas embarcaciones.

Sin embargo, con los avances en el proceso de vacunación a nivel nacional y mundial, así como la flexibilización para el tránsito internacional, hacen posible la reactivación de los cruceros.

Y gracias a esto, tal como lo anunció la alcaldesa de Santa Marta, Virna Johnson, desde el mes de noviembre estarán llegando diferentes embarcaciones con el Royal Clipper al puerto samario.

A través de sus redes institucionales, la mandataria informó que hasta el momento ya hay programados cruceros hasta el 2024, lo que significa “una gran oportunidad de reactivación y promoción de la ciudad como destino turístico internacional y bioseguro”.