Daniela Paola Morales Paredes es una joven venezolana que llegó a Barranquilla hace 4 años. Antes, ya estaba en esta capital su señora madre, Nelly Paredes.

Madre e hija llegaron a 'la arenosa' por un mejor futuro, pero desde hace 20 días, esa tranquilidad familiar que encontró en esta ciudad se tornó en incertidumbre pues no sabe de su hija y solo la ve en unos videos y unos audios que les envían a través de quien sería una madre sustituta asignada por el ICBF, pues no sabe realmente dónde está la pequeña.

La tramitología del ICBF y la falta de celeridad en el proceso de verificación de identidad, ha privado a Daniela y Nelly, de ver a su hija y nieta. Este miércoles, funcionarios del ICBF incumplieron a la cita en Medicina Legal en donde se iban a tomar muestras de ADN para probar que ella es la madre de la menor que está reclamando.

La historia

El pasado 21 de octubre, la niña de 3 años y 11 meses, de nacionalidad venezolana, fue llevada al Camino Murillo con un cuadro febril y convulsiones. Luego se le diagnosticó una infección renal.

Un familiar de la pareja de Daniela fue quien la llevó al centro asistencial porque la joven de 21 años estaba en trabajos de parto de su segundo hijo.

En ese instante la persona que llevó a la niña no pudo presentar una identificación de la menor que fue atendida de inmediato, pues los documentos aún estaban en Venezuela. La trabajadora social advirtió sobre la situación que fue puesta en conocimiento del ICBF.

Al conocer el hecho, la abuela Nelly se presentó al Camino y notificó a la entidad sobre el parentesco. Informó que “la mamá, que es mi hija, (Daniela) no pudo llevar a la niña en el momento de la emergencia porque estaba dando a luz en el Camino Simón Bolívar, el mismo día que se le presentó la emergencia con la niña”.

Nelly cuenta que la trabajadora social no tuvo en cuenta su respuesta y pasó el caso al ICBF. De inmediato, también se le prohibió estar con la niña y no se le informó que el Bienestar familiar asumía la situación.

Un día después, Daniela, con menos de 24 horas de haber dado a luz a su segundo hijo se presentó al Camino Murillo para informar que ella era la mamá de la niña, pero no llevó los documentos. Mientras la pequeña ya aparecía como de “madre y padre fallecidos”, según un documento del ICBF que Daniela llevó a Medicina Legal.

Cuenta la abuela de la niña que no le gustó que le dijeran que la menor "no tenía madre" y reclamó airadamente. "A raíz de esto nos han quitado el derecho de estar con la niña y verla".

Pasados 20 días "no sabemos nada de la niña", dijo. 

Nelly precisó que ante el requerimiento del ICBF, ocho días después de haber dado a luz a su segundo hijo, Daniela debió viajar a Venezuela a conseguir la documentación de la pequeña. De regreso se presentó ante el Centro Zonal El Recreo a donde había sido asignado el caso, pero en esa oficina pusieron en duda que fuera ella la madre legítima de la niña.

"Ahora le dicen a mi hija que tiene que venir acá a Medicina Legal a hacerse una prueba de ADN para poderle entregar a su hija", indicó mientras la joven cumplía la orden del ICBF.

Lo peor del asunto es que mientras la joven asistió a Medicina Legal,  los funcionarios del ICBF no estuvieron. Entonces, esa institución certificó en un acta que por estar el "grupo incompleto", porque la niña no fue llevada por los representantes del Bienestar Familiar, no se le pudo practicar la prueba de ADN.

Madre y abuela de la niña denunciaron también inconsistencias en la citación del ICBF a la prueba de ADN a la niña y a la mamá. Hay un error en el segundo nombre y se invierten los apellidos.

Según Daniela y Nelly, se trata de una clara vulneración de los derechos de ellas. "Por qué nos quitan a la niña si ellos están para proteger los derechos de los niños. Le están vulnerando su derecho de estar con su familia", finalizó la abuela.