Para la Directora Regional del Sena, Jacqueline Rojas, el acto de disculpas públicas por parte de dos sindicalistas de la institución, constituye “el mejor regalo de cumpleaños”.

La funcionaria hizo la afirmación poco después de aceptar las disculpas públicas de los sindicalistas Carlos Rodríguez y Manuel Bustos. “La verdad estoy muy satisfecha y contenta por la respuesta de los líderes sindicales y siento genuinas sus intenciones de ofrecer disculpas en un acto de desagravio por todos los hechos que ocurrieron en los últimos años”, destacó.

Agregó que “los colombianos debemos tener la capacidad de perdonar y de creer. Los sindicalistas han manifestado su compromiso hacia futuro de no volver a incurrir en este tipo de faltas, de guardar siempre el respeto como un valor que reine dentro de las relaciones en la comunidad del Sena. Y es mi deseo, de todo corazón, recibirlos y empezar a construir con ellos una relación donde desde siempre respetamos los derechos de las organizaciones sindicales, con un respeto profundo de las libertades y derechos al buen nombre, honra y dignidad, no solo de la Directora del Sena sino de toda la comunidad académica”.

Consideró que, precisamente, una de las dificultades y retos que enfrentaba y no había superado “era construir una relación basada en el respeto y sentirme tranquila, segura, de mi protección de los derechos como persona, como mujer, no sentir ese tipo de agresiones”.

Según Jacqueline Rojas, “la situación ya cesó y es una página superada”, tras recordar los fuertes agravios de los que fue víctima.

“Alusión a conductas delictivas, que es un tema muy delicado, que lo tilden a uno de asesino, por ejemplo, de corrupto. Que hagan alusión a prácticas inmorales desde el punto de vista sexual, que yo tenía prácticas sexuales con mujeres y después con hombres, a pertenecer a una comunidad sexual u otra. A no ingresar por méritos sino por cualquier otro tipo de prácticas. Es impresionante. Es una práctica que ante los ojos de cualquiera podría ser violencia de género. Vinculaciones a grupos al margen de la Ley, al narcotráfico. Que mi hija era hija de un paramilitar. Es muy doloroso y utilizaban todas esas expresiones que no soy capaz de repetir porque sería como victimizarme. Utilizaban muchas expresiones fuertes por escritos y difusión masiva”, indicó.

Por su parte, el sindicalista Manuel Bustos, reconoció que “de pronto en algunos casos se nos fue la mano de manera apasionada ante la inoperancia de los entes de control que han sido indiferentes a lo que está pasando en las entidades del Estado e inclusive esta, con el manejo de los recursos públicos”.

Argumentó que “tenemos el informe de la Contraloría que dice que hay un detrimento patrimonial y no pasa nada. Entonces, reconocemos que se nos pudo haber pasado la mano, pero es por la inoperancia de los entes de control tanto de Estado como institucionales”.

Concluyó que “nosotros vamos a seguir nuestra lucha, nuestra brega, en el marco legal. Nuestra palabra no la vamos a quebrantar, vamos a seguir poniendo las denuncias ante los entes de control en el marco legal, sin pasar la raya de los derechos fundamentales”.