Tras su posesión en julio de 2017 como Director de Cormagdalena, Alfredo Varela De la Rosa generó grandes expectativas para ponerse al frente de dos temas claves de la Corporación: Avanzar en la APP del Río Magdalena y el manejo oportuno y eficaz del mantenimiento del canal de acceso al puerto de Barranquilla.

En el primer caso apenas suscribió, el 12 de octubre de 2017, el acta de liquidación bilateral del contrato de APP 001 de 2014, suscrito con Navelena S.A.S., al cual le fue declarada la caducidad tras el escándalo de corrupción en el que se encontraba inmersa la empresa Odebrecht, socia mayoritaria en dicha Alianza.

Con esa decisión se consideraba una pronta implementación de un nuevo proceso, que permitiese seleccionar el nuevo aliado que se encargaría del proyecto de recuperación de la navegabilidad en el Río Magdalena, en sus diferentes fases de inversión: Construcción, reparación, mejoramiento, equipamiento, operación y mantenimiento.

Sin embargo, más fueron las expectativas generadas por el Director de Cormagdalena que los hechos concretos.

Hoy, casi un año después, la APP del Río sigue ‘en el aire’. Y Varela De la Rosa, que había ingresado en julio de 2017, renunció al cargo tan solo a 14 meses de haberse posesionado, con claras intenciones de participar en el debate para la Gobernación del Atlántico.

Pero no solo eso. Tampoco mostró eficiencia ni eficacia en el caso del canal de acceso al puerto de Barranquilla.

De acuerdo con el artículo 2o. de la Ley 161 del 3 de agosto de 1994 “Por la cual se organiza la Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena, se determinan sus fuentes de financiación y se dictan otras disposiciones”, Cormagdalena tendrá como objeto “la recuperación de la navegación y de la actividad portuaria, la adecuación y conservación de tierras, la generación y distribución de energía así como el aprovechamiento sostenible y la preservación del medio ambiente, los recursos ictiológicos y demás recursos naturales renovables”.

En consecuencia, le corresponde a Cormagdalena garantizar la navegación del canal de acceso de Barranquilla, “lo cual se logra conservando su canal navegable con la profundidad requerida por las embarcaciones de tráfico internacional que movilizan carga desde los puertos marítimos hacia el interior del país y viceversa, a través de obras de dragado y su correspondiente interventoría”.

Sin embargo, los principios de oportunidad y pertinencia no parecen ser las prioridades de  Cormagdalena.

Por lo menos eso fue lo que ocurrió en el último año cuando el puerto de Barranquilla estuvo al punto del cierre, debido a la alta sedimentación y las demoradas decisiones para contratar dragados de mantenimiento.

Lo inexplicable del caso es la manera como el Director Alfredo Varela De la Rosa contrató dos campañas de mantenimiento con la firma Dredging International N.V., por valor de 6.581 millones 768 mil 583 pesos, más la interventoría con Consultores de Ingeniería UG21 SL Sucursal Colombia, por 717 millones 257 mil 744 pesos.

La primera campaña se realizó en el mes de julio de este año cuando el canal se encontraba en una situación crítica. Todo fue a última hora, poniendo en riesgo las operaciones portuarias en Barranquilla y con ello el comercio de mercancías.

La segunda inició la semana pasada, con la misma draga Uilenspiegel, bajo las mismas condiciones de crisis en el canal y que habían obligado a reducir el calado operacional de 9.4 a 8 metros de profundidad y con tendencia a seguir bajando.

Estos hechos demuestran la falta de diligencia para planificar las tareas de dragado y ejecutarlas en el momento oportuno, sin llegar a los estados caóticos a los que se ha llegado.

Lo más grave es que la campaña que se realiza es la última del contrato, lo que indica que a partir de la próxima semana no existe un dragado asegurado, por lo menos hasta final de año, por parte de Cormagdalena.

Con Alfredo Varela De la Rosa se repite la historia de un dirigente local administrando Cormagdalena y que queda en deuda con su Región.

Anteriormente ocurrió con Augusto Noe García Rodríguez, el mismo que firmó el contrato de APP 001-2014, con Navelena, y que resultó un fracaso total.

En caso de aspirar a la Gobernación del Atlántico, ¿esta 'gestión' al frente de Cormagdalena sería la de mostrar? De hacerlo, también podría quedar encallado como lo estuvieron a punto varias motonaves por falta de un buen calado en el canal de acceso al puerto de Barranquilla.