El personero distrital de Barranquilla, Miguel Ángel Alzate, aseguró que las condiciones de seguridad en la capital del Atlántico son extremadamente preocupantes.

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Indicó que pese a las múltiples advertencias del Ministerio Público, así como los esfuerzos de la administración distrital, las estadísticas siguen siendo altas y las estrategias siguen sin mostrar resultados contundentes.

“Vemos que cada vez que se captura una persona, esta anteriormente ya ha sido capturada y tiene anotaciones. Es decir, hay un trabajo fuerte de las autoridades de Policía por capturar, pero lastimosamente cuando pasamos al escenario de judicialización, es donde vemos una de las mayores talanqueras para dejar privados de la libertad a estas personas que vienen robándole la tranquilidad a los barranquilleros”, dijo.

Álzate sostuvo, además, que otro de los obstáculos en la reducción de los hechos de criminalidad en la ciudad es la falta de políticas sostenidas en el tiempo.

“Cada vez que hay una crisis de seguridad, cada vez que hay una masacre o un pico de homicidios, vemos como las autoridades se alertan, hay operativos, hay capturas. Sin embargo, esto a los pocos días merma”, afirmó.

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El Personero manifestó que mientras no haya una política de largo plazo y con un apoyo decidido del Gobierno nacional, no se estará atendiendo de manera integral el problema de seguridad en Barranquilla y área metropolitana.

“Nosotros insistimos en que el Gobierno nacional dé un apoyo decidido, insistimos en que las autoridades administrativas sigan entregándole capacidades a nuestra Policía e insistimos finalmente que ojalá en el escenario judicial, respetando garantías como el debido proceso, el derecho de la defensa, se pueda lograr la privación de la libertad de quienes están cometiendo delitos de manera definitiva”, puntualizó Miguel Ángel Álzate.

Hacinamiento en centros carcelarios

El personero de Barranquilla también reiteró en su denuncia sobre el hacinamiento y sobrepoblación en los distintos establecimientos carcelarios de la ciudad.

Indicó que esta es una situación que lleva años y permanece sin ningún tipo de cambios. Aseguró que algunos establecimientos presentan un hacinamiento superior al 51% y estaciones de Policía hasta un 400%, entre ellas la estación San José.

“Tenemos cuatro establecimientos que tienen un promedio de hacinamiento y sobrepoblación que supera el 51%, con una excepción que podríamos plantear en la cárcel El Buen Pastor, que tiene unas condiciones óptimas de ocupación”, dijo.

Indicó que desde la Personería se ha venido adelantando las denuncias respectivas, de manera reiterada, así como también la participación en mesas de trabajo en aras de buscar alternativas y soluciones de corto plazo que minimicen estos efectos.

“Hemos logrado que haya una apertura parcial del pabellón que se construyó en la penitenciaría El Bosque, eso ha ayudado un poco, sin embargo, todavía siguen siendo cuidados paliativos frente a una situación que es un estado de cosas inconstitucional, una violación sistemática y recurrente a los derechos humanos de los privados de la libertad”, afirmó.  

Fue enfático al decir que el hacinamiento es una problemática nacional y que la incidencia desde lo local es menor. Sin embargo, sostuvo que se han adelantado acciones para ayudar a los privados de la libertad.

“Estamos día a día contribuyendo a que los privados de la libertad tengan un mejor acceso a servicios sanitarios, de salud, de alimentación, cursos de resocialización, entre otras cosas, que mermen de alguna manera esas situaciones inhumanas a través de las cuales están recluidos”, apuntó.