La Capitanía de Puerto puso en marcha una serie de estrategias con el fin de garantizar la seguridad de las operaciones en el canal de acceso, tras la fuerte creciente que registra el río Magdalena.

Así lo explicó el Capitán de Puerto, CF Carlos Urbano Montes, tras precisar que se vienen fortaleciendo los diferentes procesos, análisis y verificaciones debido a las incidencias de la época climática, especialmente por los fuertes vientos, oleajes y lluvias que se reflejan en las operaciones portuarias.

Concretamente, la situación viene incidiendo en aspectos como alta sedimentación en algunos sectores específicos como Bocas de ceniza y los kilómetros 14 y 22 del canal de acceso.

Igualmente, el alto nivel del río Magdalena, registrado en la estación San Pedrito, en Calamar, causa situaciones como el aumento de la corriente y la vegetación (especialmente tarulla), incidiendo en algunas maniobras, fundamentalmente por la velocidad de las embarcaciones, las zonas de atraque y el momento mismo de las operaciones.

“Los altos niveles que se vienen presentando se reflejan o inciden en las operaciones, especialmente en la maniobrabilidad de los buques, en la alta sedimentación en algunos sectores, lo cual es materia de verificación  por parte de un grupo técnico con equipos de nueva generación, con el fin de analizar los cambios en la sedimentación y poder informarle al gremio marítimo como  tal para que se adopten las medidas necesarias y buscar los mejores momentos del día, en cuanto al nivel del río, condiciones climatológicas de vientos y oleajes, día y noche, y poder desarrollar las operaciones que demandan mayores medidas de seguridad”, puntualizó.

Todas estas acciones se coordinan a través de un Puesto de Mando Unificado (PMU).