Costa Rica desmantela grupo de narcos, liderado por hermanos colombianos
Tenían un supermercado de fachada.
Las autoridades de Costa Rica informaron este lunes de la desarticulación de una organización narcotraficante liderada por tres hermanos colombianos que traía cocaína desde Colombia para luego enviarla a Norteamérica.
"Es un caso muy exitoso porque es una organización que tenía acceso a semisumergibles, a toneladas de cocaína, que generaba mucho dinero, que se asentó en Costa Rica, con contactos fuera del país y con un matiz violento", declaró en una conferencia de prensa el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Walter Espinoza.
Los sospechosos detenidos son los colombianos Julio César Racines Arroyo alías "el ingeniero", su hermana Claudia Racines Arroyo; su esposo Hernán Oyuela Hurtado, y otro familiar de apellidos Racines Hernández. Aún falta por detener a César Efraín Racines Arroyo, hermano de los dos primeros.
Durante un operativo que abarcó 15 allanamientos en diversas partes del país también fue arrestado Mario Rojas Mendiola, costarricense sospechoso de brindar apoyo logístico a diversas organizaciones narcotraficantes que operan en el país.
También fueron detenidos otros costarricenses de apellidos Castro Miranda, Alfaro Ulloa, Rodríguez Justavino y Salas Montero.
El director del OIJ explicó que los colombianos sospechosos son originarios del Valle del Cauca y se asentaron en Costa Rica mediante actividades aparentemente lícitas como pequeños supermercados. Un par de ellos se casaron con costarricenses aparentemente para facilitar permisos migratorios.
"El grupo criminal se dedicaba a trasegar cocaína vía marítima. Obtenía la droga en Colombia, la trasladaba a Costa Rica, la recibía en Drake (Pacífico sur), la almacenaba temporalmente y luego la enviaba a clientes en Norteamérica", comentó Espinoza.
La investigación determinó que esta organización también traficaba marihuana desde Colombia para venderla en el mercado costarricense.
El OIJ vincula a este grupo con al menos cuatro casos desde 2018 en los que los agentes decomisaron casi una tonelada de marihuana, así como 500 kilos de cocaína, un sumisumergible y rescataron a dos personas que estaban amordazadas y golpeadas en una casa.
"Esto es un mensaje de que además de los esfuerzos que realiza el Estado para la incautación de cocaína, estamos trabajando en la identificación de los grupos que están haciendo pasar la droga por nuestro territorio, y que estamos individualizándolos y haciendo golpes fuertes", expresó Espinoza.
En los allanamientos de este lunes las autoridades decomisaron 12.000 dólares y 30 millones de colones (unos 50.000 dólares) en efectivo, así como teléfonos celulares, armas y otras cosas que servirán como evidencia.
EFE