Minutos antes de que en La Habana el Gobierno y el ELN hicieran el anuncio del cese el fuego a partir del 3 agosto y por 6 meses, en Barranquilla el Defensor del Pueblo Carlos Camargo Assis veló para que haya fundamentalmente un respeto por la población civil.

"Con decreto o sin decreto nosotros vamos a ejercer nuestro mandato constitucional establecido en los artículos 281 y 282 de la Constitución política de Colombia", dijo inicialmente Camargo.

Confió en que al iniciarse la tregua "se establezcan los protocolos y las reglas de juego”. 

Añadió que en esencia, “el país y el mundo necesitan saber si los grupos armados ilegales van a cesar cualquier hostilidad en contra de la población civil".

"Que le digan al país y al mundo si van a seguir reclutando niños, niñas y adolescentes, que digan qué va a pasar con las situaciones de tortura y tratos crueles a los que someten y exponen a la población civil en el territorio nacional".

Igual requirió que haya claridad sobre “qué va a pasar con los actos de terrorismo, qué va a pasar con los secuestros, qué va a pasar con las extorsiones, qué va a pasar con los desplazamientos forzados y con los confinamientos de las comunidades”.