Un avión DC3 destinado a transportar carga y que hacía la ruta Puerto Inírida, capital de Guanía, hacia el corregimiento de San Felipe, se salió de la pista en momentos que aterrizaba.

El percance no dejó víctimas fatales ni lesionados entre la tripulación, solo el susto.

La emergencia de la aeronave se originó en fallas mecánicas que aún son materia de investigación, dijeron fuentes de la Aeronáutica Civil.

Jorge Díaz Martínez, director de la Defensa Civil, dijo que la pericia del piloto garantizó que aterrizara de emergencia sin dejar víctimas que lamentar.

“Hubo una posible falla en el tren de aterrizaje de un avión que iba camino al corregimiento de San Felipe, pero que gracias la pericia del piloto pudo aterrizar con lujo de detalles no se presentaron víctimas ni heridos”, manifestó el socorrista. 

El avión que transportaba víveres para abastecer a las comunidades alejadas de esa región, pertenece a la empresa Aliar que opera en esa zona. 

En la aeronave accidentada viajaban seis personas entre ellas la tripulación, quienes, reiteramos, no resultaron lesionadas. 

Se conoció en una primera versión del capitán al mando de la aeronave, Diego Arias, que “durante el aterrizaje no se pudieron controlar las llantas del avión el cual giró hacia la izquierda y se salió de la pista(...) aparentemente se presentó una falla de llantas (posible desinflada, explosión) de origen aún indeterminado".

La pista del corregimiento de San Felipe en el departamento del Guainía, donde viven en su mayoría colonos e indígenas, es en tierra y con mínimas condiciones técnicas para los aterrizajes de estos aviones DC3 que son los únicos que logran arribar en estos territorios.  

La emergencia la atendió la Armada Nacional, que presta el servicio de seguridad en ese departamento de la Amazonía colombiana.