El Área Metropolitana de Barranquilla solicitó el acompañamiento del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y de la Procuraduría Delegada para Asuntos Ambientales y Agrarios, con el fin de promover una transición armónica ajustada con la Política Nacional de Gestión Ambiental Urbana expedida por el Minambiente, a partir de la decisión de la junta del AMB de constituir a la entidad como autoridad ambiental en el territorio de su jurisdicción.
 
En carta dirigida al ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Ricardo José Lozano Picón, y al procurador delegado para Asuntos Ambientales y Agrarios, Gilberto Blanco Zúñiga, el director del AMB, Libardo García Guerrero, los invitó a ser parte de una mesa de trabajo conjunta con la Corporación Autónoma Regional del Atlántico- CRA- para garantizar total transparencia “en esta nueva realidad que garantiza una nueva visión distrital, metropolitana y departamental de la gestión ambiental sostenible en la jurisdicción que ejercen de forma conjunta ambas entidades”.
 
“El Ministerio de Ambiente como ente rector de la gestión del medio ambiente y la Procuraduría Delegada para los Asuntos Ambientales son necesarios para el inicio de este diálogo interinstitucional, en el que pretendemos se constituyan como garantes de imparcialidad técnica y jurídica para armonizar el relacionamiento institucional que el medio ambiente requiere en nuestro territorio”, manifiesta en su misiva el director del AMB, Libardo García Guerrero.
 
La petición del AMB se soporta en el reconocimiento del ambiente como un hecho metropolitano amparado en la Política Nacional de Gestión Ambiental Urbana y desarrollada normativamente en las leyes 99 de 1993 y 1625 de 2013, que establecen que las Áreas Metropolitanas pueden “ejercer las funciones y competencias de autoridad ambiental en el perímetro urbano”.
 
“Nuestra intención institucional es que Minambiente como ente rector del Sistema Nacional Ambiental- SINA- direccione de manera armónica el proceso de definición de competencias entre autoridades ambientales urbanas y rurales. Es definir los límites de acción entre la Corporación Regional Autónoma del Atlántico y el Área Metropolitana de Barranquilla, para asegurar el desarrollo sostenible en el territorio de nuestra jurisdicción”, concluye el director del AMB.

*Con información de Alcaldía de Barranquilla