El alcalde Alejandro Char volvió a sus labores en Barranquilla después de su visita al Papa Francisco, la semana anterior. El mandatario informó en su cuenta de Twitter su regreso mientras inspeccionaba las obras de canalización de los arroyos de la calles 91 y 92.

Informó que la ciudad aplicará por primera vez el método Pipe Jacking, una tecnología europea usada para los procesos de construcción de vías e instalación de estructuras.

“Son múltiples los beneficios de esta tecnología: Disminución de traumatismos y afectaciones en movilidad y mejoramiento de la convivencia”, explicó Char en su cuenta de Twitter, en referencia al método Pipe Jacking. 

"No creo que en Latinoamérica se haya hecho un proyecto con estas condiciones tecnológicas, primero por el tema de los arroyos en la ciudad y luego por la tecnología de punta. Este arroyo se está canalizando sin tener que paralizar la movilidad y tampoco generar molestias en el sector. Le damos los aplausos a esta técnica", apuntó Char. 

Para esta obra se cuenta con el apoyo de expertos internacionales, la máquina tunelador. Irá avanzando, según se estima, en 10 metros lineales cada 24 horas. Según las proyecciones en 5 o 6 meses deben estar listos los 1.500 metros, que es la extensión del arroyo.

El alcalde precisó que al mismo tiempo que se canaliza el arroyo por la parte inferior se irán realizando las obras complementarias como rejillas, captaciones, arborización, senderos peatonales e iluminación.

El arroyo de la calle 91 y 92 tiene una longitud de 1.500 metros lineales, un caudal de 29.3 metros cúbicos por segundo y una velocidad de 6.13 metros por segundo. Recorre los barrios de la localidad Riomar y su canalización beneficiará a más de 100.000 habitantes.