Aunque no nació en Barranquilla, Santi Navarra Montenegro se siente tan barranquillero como el Junior. Su papá, Rafael, nació en Mompox, pero se crió en Barranquilla y su mamá, María Alejandra, sí es de esta ciudad.

Santi, de 17 años, nació en Ciudad de México, es piloto de kart y participará en el GP Rotax del Caribe que comenzará este jueves en el Gran Malecón del Río.

Sus padres se conocieron en Barranquilla, pero fueron a especializarse en México y se quedaron a vivir en ese país. Rafael es médico coloproctólogo y María Alejandra es abogada con maestría en administración de negocios de la UNAM, misma donde se especializó su esposo.

Como muestra de lo barranquillero que se siente, Santi luce con orgullo la camiseta del Junior en sus prácticas y en sus carreras. Sus amigos al verlo le preguntan si es de las Chivas Rayadas y el aclara enseguida: “Es Junior, tu papá”. Lo único que no tiene de barranquillero es el acento, totalmente mexicano.

Santi cursa duodécimo grado en el Instituto Cumbres Lomas y desde temprana edad comenzó a interesarse por los karts.

“Desde los 6 o 7 años comencé a montar los karts y siempre ha estado en mi sangre. Desde que nací lo primero que vi, creo que fue un motor”, asegura Santi, quien ha corrido en países como Canadá y aspira a hacerlo en Italia el próximo año.

Del GP Rotax del Caribe en Barranquilla se enteró vía internet y de una dijo que tenía que estar allá porque le gustan las carreras callejeras y porque quería que toda la familia que tiene aquí lo viera competir y ganar.

“Quiero darme a conocer en Barranquilla, que todos hablen de mí como un gran piloto”, señala emocionado.

Desde ese momento hizo todas las diligencias para lograr su participación y le dijeron que tenía que ganarse el cupo en el Club Rotax de Cajicá.

Allá realizó tres carreras. En la primera, tras salirse de la pista, y después de que su carro no encendía, logró rebasar a todos sus rivales hasta terminar en primer lugar. En la segunda quedó tercero y en la última, después de ganar la pole, el motor de su carro se apagó y cuando encendió ya le habían sacado dos vueltas de ventaja. Aún así consiguió su cupo para la carrera de Barranquilla.

“Mi segunda carrera fue en el autódromo Hermanos Rodríguez (México) donde nadie sabía el circuito, nadie se sabía el trazado y en la primera práctica logré la pole, en la segunda quedé tercero y en la tercera fui segundo. En la clasificación general quedé sexto. Fue muy bueno, estaba lleno de shifters y yo tenía un Honda, una diferencia abismal. Quedar de sexto con puros europeos, ni siquiera yo me lo creía”,

A Santi Navarra le cuesta trabajo repartir su tiempo entre la escuela y las carreras. De hecho, al GP Rotax del Caribe apenas llegará el jueves por la mañana y se regresa a México el domingo por la noche, ya que tiene clases el lunes. Prácticamente le toca bajarse del avión directamente a la pista.

“La mayoría de sus amigos que están en este deporte están en escuelas para deportistas de Alto Rendimiento, nosotros hemos tratado de que termine su escuela de manera tradicional. Ha costado un poco por los permisos que hay que sacar para que pueda competir”, relata su mamá María Alejandra Montenegro, quien trabajó en el consulado de Colombia en México.

Ela no podrá acompañarlo ya que estará con otro de sus hijos (Matías) en un campeonato de fútbol en Querétaro representando a su colegio. Su papá lo alcanzará en Barranquilla el viernes.

“Voy a llevar las dos banderas porque no puedo dejar a México, aquí nací y me crié, pero amo a Colombia por mi familia”, afirma Santi, quien tiene licencia de piloto deportivo de la FIA México.

En Barranquilla participará en la categoría Rotax, aunque la suya es shifter, que es de cambios. También ha corrido en categorías como Fórmula Mundial, Fórmula 5 y Gran Turismo Live.