La hora de la partida llegó en el municipio del oriente antioqueño de La Ceja, donde algunos de los corredores más importantes del planeta desafiarán un circuito de cinco vueltas a más de 2000 metros de altura, pero donde especialmente las miradas de los aficionados estarán puestas es en un, literalmente, vecino del municipio: Fernando Gaviria. 

No es exageración cuando se dice que desde la misma puerta de la casa de la familia Gaviria Rendón se puede ver con lujo de detalles la partida y la llegada de la carrera. Así lo confirma don Hernando, el papá y primer formador de quien es hoy el corredor más rápido del mundo. 

“La verdad es que sí. La casa está por ahí a unos 80 metros de la meta. Sentado desde allí se puede ver perfectamente el embalaje, es que no son ni dos cuadras”, dijo Hernando a Zona Cero pocos minutos antes del inicio de la jornada de este miércoles. 

Hernando, quien desde niño comenzó a cultivar a Fernando en el arte de la velocidad recuerda que es un momento muy bonito no solo para su hijo, él y su familia, sino para todo el humilde municipio antioqueño que vio por sus carreteras crecer a la figura mundial del UAE Team Emirates. 

“Lo que mucha gente desconoce es que Fernando empezó en la ruta, luego dio el salto a la pista donde fue campeón mundial. Luego volvió a la ruta. Yo tuve esa visión de formarlo en todos los aspectos. Estar acá es como volver a sus raíces, no solo en el sitio donde aprendió a montar en bicicleta, sino donde creció”, enfatizó. 

Antes de tomar partida, el mismo Gaviria reconoció que no era una competencia del montón para él. Una gran cantidad de familiares se le acercaron al vestidor para saludarlos antes, con los minutos está se llegó poner un poco tensionado, definiendo lo que siente. 

“Nervios, porque se siente demasiado espectacular correr en casa. En las tierras donde me crie disfrutaremos el día y que gane el más fuerte”, enfatizó el pedalista que se proclamó como campeón de los puntos en el Giro de Italia. 

A la fecha, Gaviria está empatado con Nairo Quintana como los corredores colombianos con más triunfos en la máxima categoría del ciclismo mundial, con 37. Su victoria en La Ceja lo transformaría en el más ganador de todos los tiempos en el país. Y esto, no le importa. 

“Creo que ya lo he dicho antes, no significa nada. Solo es un número, porque al final no programo retirarme y pienso ganar muchas carreras más y poner ese número más alto”. 

Sobre sus aspiraciones al triunfo, dijo que hay un grupo de rivales duros a vencer en el sprint, pero que hay un amigo que le gustaría que ganara si él no pude cumplir con la misión este miércoles, su excompañero, el monteriano Álvaro Hodeg (Deceunnick Quick Step). 

“Hay rivales fuertes. Esperemos que si no soy yo sea Álvaro, porque le tengo mucho cariño y es un gran corredor. Creo que con Álvaro tenemos una rivalidad muy buena y al final seguimos siendo amigos. Al final que gane el mejor”, cerró.