Claudia Restrepo es el nombre  de la mujer que protagonizó la historia viral del fin de semana en Barranquilla, donde se aseguraba que ella supuestamente tomó el lugar de otra persona para competir y que además de ello habría hecho trampa poniendo a otra persona a correr por ella.

“No es verdad que yo haya hecho trampa y no suplanté a nadie. Fui a correr en un plan familiar. Iba en recocha, como decimos acá y no entiendo al fin de cuentas por qué terminamos ganando algo”, expresó la mujer a Zona Cero, que la contactó para saber su versión de la historia.

Todo empezó unos días antes de la competencia, realizada la mañana del pasado domingo, cuando a la señora Claudia Restrepo una compañera de trabajo, llamada Berenice Tafur, le obsequió un kit para la competencia el cual Tafur no utilizaría por estar incapacitada.

Así, tanto Claudia como su esposo pensaron que era un buen plan salir a trotar la distancia y que la pasarían muy bien. Así mismo, para no dejarlo solo se llevaron a su hijo adolescente para que los acompañara.

Estando en la salida de la carrera, el hijo de Claudia le dijo que quería competir y por eso ella le dio el kit que a su vez su amiga le había prestado, para que tomara la partida. Pero ese cambio de manos fue lo que terminó en un malentendido que hizo eco en redes sociales.

Por algún motivo, el kit de Tafur, fue luego de Claudia y finalmente del joven terminó siendo uno de los que inscritos para la carrera de la categoría 10k master femenino y no una carrera meramente recreativa. Por lo tanto, el inocente gesto de Claudia para con su hijo terminó teniendo una connotación equivocada por el resto de los competidores que se sintieron ofendidos.

“Cuando llegamos a la meta nos quedamos un rato, es más mi hijo, que es menor de edad, ya se quería ir. Pero cuando anunciaron por los altoparlantes que el número de mi hijo había ganado me emocioné y subí a recoger el trofeo. Me tomé fotos y las puse en los grupos de la familia, por la emoción. Luego recapacité y me di cuenta que eso ni era mio y por eso le devolví el trofeo a los organizadores”, narró.

Así las cosas, la mujer pide que le bajen el tono a las comentarios malos intenciones y que sepan que fue lo que realmente pasó. Es más, aprovechó para ofrecerf disculpas a cualquier persona que se haya sentida ofendida por el malentendido.

“Nosotros solo salimos a hacer un plan familiar y no entendemos en qué momento pasó esto. Mi hijo es menor de edad y cuando llegó al colegio quedó sorprendido por lo que pasó. Nosotros nunca fuimos a competir ni menos a hacer trampa. De todas maneras ofrecemos disculpas por si alguien se sintió ofendido porque hay gente que entrena y va a competir”, manifestó la mujer.

Lo que queda de lección es que que se debe tener más cuidado con las mediciones y tiempos de este tipos de competencias y hacer las claridades sobre los kits que cada gente adquiere para la competencia, para así evitar caer en este tipo de confusiones.