Lourdes Rodríguez, de 60 años, ha vivido una tercera parte de su vida en el coliseo de microfútbol. Si la desaloja no sabe adónde ir.
Foto
Seguimiento.co

Share:

“Me quieren sacar del Coliseo Menor y no tengo para donde irme”: Lourdes

Seguimiento.co y Zona Cero publican una serie periodística que narra el drama que viven los cuidadores de los escenarios deportivos que serán demolidos en Santa Marta para los Juegos Bolivarianos. No los tuvieron en cuenta pese a que habitaron estos lugares por más de 20 años y ahora quieren desalojarlos por la fuerza.

Lourdes Rodríguez Oyola tiene 60 años. Los recuerdos que se guardan en su memoria de los últimos 19 años de su vida se limitan a las 4 gigantes paredes del coliseo Menor que hace parte de la villa olímpica de Santa Marta, donde se han formado generaciones de deportistas del microfútbol.

La permanencia de Lourdes y el cariño que se ha ganado entre quienes la conocen le dieron el apelativo de ser ‘la guardiana del Coliseo Menor’, apodo que ha quedado registrado en recortes de prensa que ella guarda como un recuerdo del que para ella ha sido el hogar que vio crecer a sus hijos y hasta sus nietos.

Pero a su prolongada edad, esta mujer que durante más de dos décadas crio a sus seis hijos en calidad de madre cabeza de familia, enfrenta desde el mes de diciembre un lío jurídico que la podría dejar en la calle, sin ninguna perspectiva de qué hacer con su vida.

El Coliseo Menor es uno de los escenarios de la Villa Olímpica que serán demolidos y reconstruidos.

Su calvario comenzó cuando la Alcaldía recibió la titularidad de los escenarios por parte de la Gobernación del Magdalena para construir allí las nuevas obras de cara a los Juegos Bolivarianos. Previendo que este escenario era ocupado por la mujer, la Alcaldía decidió adelantar una serie de procedimientos policivos para lograr que desalojara el escenario.

“Ellos (la Alcaldía) concluyeron que Lourdes era una ocupante irregular, como si fuera una invasora. Pero a ellos se les dijo que ella realmente es una vinculada no formal con el departamento del Magdalena y con Indeportes. Son denominaciones distintas. Sin embargo, nos negaron todos los recursos y el 23 de diciembre le notificaron que a ella le iban a hacer un desalojo y que tenía 3 días para desalojar”, relata el abogado Juan Carlos Gómez, defensor de Lourdes.

Para salvaguardar los derechos de la anciana mujer, el abogado presentó una tutela y un juez avaló parte de los derechos que tenía Lourdes: ordenó a la Alcaldía que durante 6 meses le suministre vivienda digna mientras que ella resuelve su proceso laboral y le concedió un mes, hasta el 5 de febrero, para ocupar el coliseo menor hasta que la Alcaldía le provea dicha vivienda. El juez la favoreció pues Lourdes ya tenía un proceso desde el año 2011 en el que busca legalizar su vinculación laboral como vigilante del escenario deportivo.

Lourdes ha vivido casi una tercera parte de su vida cuidando y aseando el escenario deportivo.

Sin embargo, según relató Lourdes a Seguimiento.co, este viernes por la noche, varios funcionarios de la Alcaldía se acercaron hasta el coliseo menor y le pidieron firmar un papel en el que se comprometían a darle un dinero el próximo lunes, siempre y cuando desalojara el predio este sábado a primera hora.

“Anoche vino el doctor Abraham Katime con Cesar Rovira, otro señor y un personero, que hoy a las 8 de la mañana yo tenía que desocupar y el lunes me hacían efectivo un dinero. Yo tengo una tutela que me ampara por un mes, desde el 5 de enero hasta el 5 de febrero. A partir de ahí, me tienen que dar un arriendo de vivienda digna por seis meses”, recalca la mujer.

Tanto Lourdes como su abogado son conscientes de la importancia que tiene la construcción de los escenarios deportivos para los Juegos Bolivarianos, pero ellos esperan que antes de que se ejecute el desalojo, se garantice la vivienda a Lourdes por los próximos seis meses, tal como lo ordena un juez.

"Yo no me opongo al progreso de la ciudad, y el progreso de la ciudad está en hacer buenos escenarios y unos juegos internacionales. No me opongo. Lo único que pido es que reconozcan que yo tengo 20 años aquí. Yo tengo un proceso desde el 2011 donde yo pedía que se legalizara mi celaduría. Yo aquí soy celadora, aseadora y portera", afirmó la mujer. 

“Yo no tengo a donde ir, no tengo amigas adonde yo vaya a guardar las cosas; mis hijos, la mayoría están conmigo, otros viven con sus suegros. Honestamente no tengo, les dije que me dieran lo que me vayan a dar el lunes, y yo el lunes o martes temprano me voy, porque con plata tú abres camino. Pero si no me garantizan al menos el dinero, yo no tengo para donde irme”, dice Lourdes.

Mientras esta situación se esclarece, Lourdes, que además vive con dos de sus hijos y con un par de nietos menores de edad, seguirá contando los días mientras encuentra un lugar donde vivir. 

Más sobre este tema: