Cada día sorprende menos la precocidad de Kyliam Mbappé, acostumbrado a conseguir, con 19 años, gestas que otras estrellas del fútbol mundial firman con más madurez. Contra el Lyon consiguió su primera cuádruple el día en el que volvía tras purgar una sanción.

Si el pasado Mundial el francés consiguió que se le comparara con Pelé, por el descaro que muestra en su juventud, el atacante, modesto en sus declaraciones, no quiere perder esa estela y frente al Lyon, segundo presupuesto de la liga francesa, marcó cuatro goles en 13 minutos.

Además, fue a él a quien el portero lionés Lopes hizo el penalti que permitió a Neymar abrir el marcador en el minuto 9. Luego, el partido se convirtió en una permanente búsqueda del gol por parte de Mbappé, que marró varias ocasiones antes de abrir el fuego.

El jugador, adquirido el pasado verano por unos 180 millones de euros, el segundo fichaje más caro de la historia del fútbol, no quiere quedar oculto entre la constelación de estrellas del París Saint-Germain.

De hecho, su conexión con Neymar parece funcionar de maravilla, porque el brasileño, el más caro de todos los tiempos, le dio dos de las cuatro asistencias que contribuyeron al cuádruple del francés.

Nadie en Francia con 19 años había marcado cuatro goles en un partido, otro signo de que su trayectoria parece diseñada para llegar a lo más alto.

Mbappé fue el verdadero artífice de un triunfo que permitió a su equipo firmar su novena victoria en otros tantos partidos, un nuevo récord que deja viejo el que hasta ahora tenía el Olympique Lillois desde la temporada 1936-1937.

El equipo francés, que no parece encontrar en Francia rival a su altura, está a un triunfo del mejor inicio de campaña de un club europeo, que con diez triunfos poseen el Bayern de Múnich alemán (2015-2016) y el Roma italiano (2013-2014).

Para ello, el técnico alemán Thomas Tuchel cuenta con su armada de estrellas y con un ariete que tiene su daga bien afilada y su ambición intacta.

Mbappé suma ya en su liga ocho tantos, lo que le coloca en la cabeza de la tabla de anotadores empatado con Neymar.

El equipo tiene ya una renta de ocho puntos con respecto al segundo y en Europa, su principal objetivo, ha mostrado una de cal y otra de arena.

Tras perder contra el Liverpool en la primera jornada, aplastó al Estrella Roja la pasada semana en el Parque de los Príncipes (6-1), con un triplete de Neymar y un tanto de Mbappé, el último de la vanguardia parisiense a sumarse al festival.

El joven delantero francés buscó el tanto con rabia, como si no quisiera descolgarse de una fiesta organizada por Neymar y a la que también se habían dado cita el uruguayo Edinson Cavani y el argentino Ángel di María.

Frente al Lyon, sobre el papel el principal rival de los franceses por presupuesto y porque el año pasado ya fueron subcampeones, su hambre estaba intacta.

El jugador, que volvía de una sanción, dejó un maravilloso recuerdo en la retina de los espectadores en vísperas de que la revista "France Football" desvele los 30 candidatos a sumar el Balón de Oro.

Mbappé no solo aparece como uno de los favoritos para lograrlo, porque fue una de las piezas clave de Francia en el pasado Mundial y porque está dispuesto a aprovechar estos dos meses, en los que los periodistas de la revista deben votar, para apuntalar su candidatura.

Lo que ofrece menos dudas es que el jugador del PSG será el primer en ganar el recién estrenado trofeo Raymond Kopa, con el que "France Football" quiere recompensar al mejor sub-21 de la temporada.

EFE