Junior: cuando no alcanza el fútbol, ni tampoco la autocrítica
Luego del pálido y comprometedor empate ante Santa Fe.
“¿Autocrítica? ¡Ninguna!”, fueron las primeras palabras del entrenador Luis Amaranto Perea la noche de este jueves luego del empate a un tanto en el Metropolitano entre Junior y Santa Fe, una frase que descuadró tanto como el resultado que había obtenido unos minutos antes.
Junior saltó en la cancha con un planteamiento, que como todos los que proponen los entrenadores es, sobre el papel, para ganar y mejor que el del rival.
La diferencia siempre está en que hay técnicos que se dan cuenta de que las cosas no van por donde ellos pretendían y tienen la serenidad de corregir sobre la marcha y, con una mezcla de capacidad y un poquito de suerte, dan la vuelta a la situación y logran el objetivo de ganar.
Sin embargo, algunas veces, pasa como la noche del jueves en el Metropolitano. Se ven sobrepasados por el rival, sus ideas los dejan tan mareados y confundidos, que al final terminan alucinados con que lo que hicieron era lo perfecto e ideal.
Perea y su Junior de anoche, falto de juego e ideas para romper la defensa aplicada de Santa Fe, un equipo que remató los 20 minutos finales del partido con uno menos tras la expulsión de un defensa, no tuvo el juego necesario para poder salir de lo que le propuso el conjunto bogotano.
El equipo barranquillero logra su único tanto en una jugada aislada. Fuera del contexto de un partido, pues es que Junior nunca volvió a presionar la salida bogotana de forma agresiva como lo hizo Fabián Ángel para recuperar la bola y menos aún, volvió a intentar remates desde fuera del área como lo hizo Freddy Hinestroza.
Luego de eso, Junior con la bola fue poco creativo y se estrelló, una y otra vez, con la muralla bogotana. El portero de la visita, Leandro Castellanos, apenas y tuvo que arrodillar una vez en el segundo tiempo para contener un cabezazo de Miguel Ángel Borja.
Los argumentos de juego del Junior, que tuvo la bola un 59% del tiempo, le dieron apenas para empatar en remates de peligro con los ‘Cardenales’, con tres por cabeza.
Jugadores como Fabián Sambueza siguen luciendo fuera de forma y no aportan para nada al armado del equipo y otros como Carmelo Valencia llegan desde el banco para decorar en el terreno de juego.
El panorama se ve complicado de cara al juego del domingo, el primero en una llave de eliminación directa, por la Liga Colombiana, ante el mismo rival.
Todo es susceptible de mejorar, pero para eso se tiene que jugar mejor -a la fuerza para que alcance para avanzar de ronda- eso sí, sin autocrítica, es muy complicado.