Lo único que faltaba para sentenciar la salida de Arturo Reyes de la dirección técnica del Junior era perder un partido como local. Y Envigado le dio la estocada al ganarle 2-1 al equipo rojiblanco y dejarlo en el último lugar de la tabla.

El público, en pleno partido, descargó su furia contra el entrenador y contra varios jugadores. A Reyes le cantaron varias veces el “ya se va” y ‘Cariaco’ González fue abucheado y silbado cuando fue sustituido en el segundo tiempo.

Después del partido, Reyes se fue custodiado por los escudos de la Policía porque desde la tribuna le llovían todo tipo de guijarros. Los únicos que se retiraron en medio de aplausos fueron Juan Fernando Quintero y los jugadores del Envigado.

Arturo Reyes movió el line up. Dejó en el banco a titulares habituales como Carlos Bacca, Omar Albornoz y Carlos Sierra y metió de entrada a Léider Berdugo, ‘Cariaco’ González, Vladimir Hernández y Brayan León. 

Pero, a pesar de los cambios y las intenciones de Reyes, la ineficacia fue la misma de partidos anteriores. Solo un remate de ‘Cariaco’ González, que manoteó el portero Felipe Parra y después pegó en el palo y un centro de Vladimir, que no cabeceó bien José Ortiz, fueron las únicas situaciones de peligro en el primer tiempo, en donde abundaron las imprecisiones. 

Envigado tuvo una más clara con un zapatazo a ras de piso de Diego Moreno, que sacó Sebastián Viera.

En el minuto 8 del segundo tiempo, se le empezó a venir la noche a Junior y a Reyes. Henry Mosquera se descolgó por el costado izquierdo, dejó regado a Iván Scarpeta y definió a un costado de Viera para poner el 1-0 que caldeó los ánimos en las tribunas del estadio Metropolitano, donde empezaron a entonarse cánticos en contra del técnico y los jugadores.

Reyes hizo tres cambios de una: Carlos Bacca por Vladimir, Freddy Hinestroza por Berdugo y Hómer Martínez por Castrillón. Con esta última variante, Junior pasó a jugar con tres centrales.

Pero Envigado era el que mandaba en el partido y estuvo cerca del segundo con un disparo de Juan Manuel Zapata que se estrelló en el vertical.

Por el costado de Hómer, Envigado entraba libremente y, como consecuencia de ello, Reyes decidió ubicarlo por el centro.

Envigado puso el 2-0 en el minuto 24 a través de Zapata, lo que llevó a Reyes a quemar otro cambio: Léider Berrío por ‘Cariaco’, que recibió la reprobación del público.

Quintero, en el minuto 27, hizo renacer la esperanza de los junioristas, con un tiro libre cobrado de manera magistral que dejó sin ningún chance al portero Parra. Fue el primer tanto de ‘Juanfer’ con la casaca rojiblanca y apenas el cuarto de Junior en el campeonato.

Bacca, después de una desborde fallido que fue reprochado por el público, hizo otro por el costado izquierdo y sacó un centro que no encontró destinatario.

Los minutos fueron pasando y Junior no volvió llegar con claridad al pórtico del Envigado salvo en la última jugada con un cabezazo de Didier Moreno, que Parra envió al tiro de esquina.

Junior, el equipo que trajo a una figura de talla internacional como Juan Fernando Quintero, es hoy el colero campeonato. La situación de Arturo Reyes es insostenible y seguramente llegará otro técnico, que tendrá la difícil misión de resucitar a este equipo entre los muertos.