Medio gol es de él. Fue quien sacó ese zapatazo que se desvió en Gabriel Fuentes e hizo explotar el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.

Fabián Sambueza fue el revulsivo en el ataque rojiblanco. El argentino volvió en un gran nivel y le colocó el 'picante' al juego de Junior ante el Deportivo Pasto.

"Importante el resultado porque pudimos sacar una ventaja después del juego que ellos vinieron a proponer", expresó el jugador.

Reconoció que esa jugada fue un desahogo personal después del semestre complicado que ha tenido, con lesión y una expulsión, por ello gritó el gol con mucha euforia.

"Grité el gol como se debe hacer en una final. Lo grito por las ganas que tenía de jugar y de ayudar al equipo", confesó.

Agregó que en el partido de vuelta, que se disputaría en Bogotá, el próximo miércoles, Pasto deberá dejar espacios que pueden ser aprovechados en contragolpes rojiblancos.