El hapkido, un asunto de familia para Atlántico: madre e hija le dieron medallas
Joseling Amú ganó plata y su mamá, Diosan Valencia, bronce, dirigidas por Herbin Amú, padre y esposo, respectivamente.
El hapkido le dio al Atlántico sus dos primeras medallas en los XXII Juegos Nacionales Eje Cafetero 2023, con dos miembros de una misma familia: Joseling Amú y su mamá Diosan Valencia.
Joseling obtuvo medalla de plata en la categoría +80 kg tras perder 6-4 en la final con Claudia Hernández (Valle), mientras que Diosan logró la de bronce en -80 kg, tras caer 13 a -1 con Katherine Toro (Valle), quien se alzó con la medalla de oro.
Tanto Joseling como Diosan son entrenadas por Herbin Amú, presidente de la Liga de Hapkido del Atlántico y otra hija suya, Handry Amú, participó en la categoría -65 kg, siendo eliminada en cuartos de final al caer 7-1 ante Angie Guerrero (Bogotá).
“Fue algo increíble, salí emocionada, agradezco mucho a Indeportes Atlántico, a mis entrenadores, que fueron parte vital para lograr esta victoria, también a mis compañeros que me ayudaron, me dieron fuerza, me hicieron relajar y concentrarme en el combate”, afirmó Joseling Amú, nacida en Buenaventura y quien con familia se vino en 2020m para Barranquilla.
“Esto lo considero el inicio de todo, voy a luchar y a entrenar duro para conseguir la medalla de oro en los próximos Juegos Nacionales”, agregó.
Joseling contó sus sensaciones de estar compitiendo con su mamá y dirigida por su papá.
“Es algo increíble se siente un poco de presión porque es la familia, pero es muy hermoso sentir el cariño de todos mis compañeros, de mis padres y de mi hermana”.
La de Diosan Valencia fue la primera medalla de Atlántico en estos Juegos.
“Un poquito triste porque iba por la de oro y a uno le da a uno esa impotencia no haber llegado, pero también feliz porque es la primera medalla para el Atlántico, con todo ese apoyo que tuvimos de nuestros entrenadores, de mi hija que nos apoyamos entre las dos, yo la entreno, ella me entrena. Esa es una de las partes que nos hizo llegar a esta victoria”, contó Diosan, quien no ocultó su felicidad por el logro de su hija Joseling.
“Es emocionante, todos lloramos de la emoción. Nosotros hemos sido una familia de artes marciales, ella (Joseling) duró un tiempo entrenando karate, pero después no entrenó más y vino el padre y la llevó al hapkido. Entrenaba conmigo y con el papá y allí fue creciendo”.
A pesar de no haber cosechado una medalla de oro, Herbin Amú terminó satisfecho con la participación de este deporte en los Juegos.
“Soñábamos con más, con mejores resultados, pero también nos vamos contentos porque hay cosas que están en las manos de uno y hay cosas que no. Lo que estaba en las manos de nosotros se hizo, lo que no estaba, no se pudo hacer. Hubo irregularidades en el evento y nosotros como Liga nueva pagamos la novatada, nos cobraron el derecho a piso, pero ellos saben que nosotros vamos por todo”, afirmó el entrenador y dirigente, quien valoró el hecho de que Indeportes haya empezado a creer en un deporte que no estaba en el departamento.
“En dos años empezamos a invertir, a creer, por eso le doy las gracias al director (Luis Restrepo) y a los metodólogos porque permitieron que este deporte estuviera en Juegos. Esta es una Liga que tiene dos años de competencia y que recién arranca un proceso para cosas grandes”.
Herbin reveló lo que significó para él ver a su esposa y a sus dos hijas participando en los Juegos Nacionales.
“Siempre llevo un segundo o un tercer entrenador porque yo no dirijo los combates de mis hijos, uno siente que le va a dar un infarto, uno ha sido competidor y eso es bastante complicado, pero me tocaba porque era el momento preciso para poder conseguir una medalla y lo hice, pero es difícil porque se encuentran los sentimientos. Necesitas a alguien con un equilibrio, que sea más objetivo porque uno con los hijos no es objetivo, les exige demasiado, los presiona demasiado, pero ella soportó la presión lo hizo bastante bien y para mí fue la campeona de la categoría”, concluyó.
Las competencias del hapkido culminaron el domingo en el Centro de Convenciones de Armenia.