El estado de salud del exárbitro de fútbol profesional Wilson Ramírez sigue siendo bastante delicado luego de accidente de tránsito que sufrió en la madrugada de este miércoles en la vía que comunica al corregimiento de Caracolí con Galapa.

Ramírez, de 56 años, se encuentra recluido en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica Reina Catalina de Baranoa.

“Wilson sufrió un paro respiratorio en la madrugada, tiene una contusión en el tórax, un trauma craneoencefálico severo, está bastante delicado, el corazón se le paró, pero lo lograron reanimar. Estamos orando mucho y teniendo mucha fe de que Wilson salga victorioso de este partido tan duro”, manifestó el exárbitro profesional Breyner Escobar al programa ‘Los Dueños del Balón’, de RCN Barranquilla.

Ramírez se desplazaba en su motocicleta cuando fue embestido de frente por un bus intermunicipal. Con él iba de parrillero un hombre que también presenta lesiones graves.

“Hay que seguir orando, la familia está destrozada, Wilson está sedado, no ha reaccionado desde el accidente, pero con mucha fe de que se va a mejorar”, aseguró Escobar a quien lo une una gran amistad con el destacado exárbitro.

“Él me aceptó en el colegio (de árbitros) cuando yo era un niño, siempre ha sido amigo de mi papá (Ovidio Escobar, exárbitro) y me enseñó muchas cosas antes de ser árbitro profesional. Es una gran persona, no merece esto”, agregó Escobar.

Wilson Ramírez se retiró del arbitraje en 2006 luego de una carrera de 22 años.

“Era un árbitro Fifa sin escarapela, el árbitro de los chicharrones, que dirigía los partidos que no dirigían los Fifa. Los sacaba como si fuera un partido en el barrio San José”, recordó Escobar.

En la actualidad, Wilson Ramírez de desempeñaba como árbitro en las canchas de Nueva Granada y Las Palmas.

“Nunca tuvo la escaparela Fifa, a pesar de que su rendimiento era óptimo. Sólo Dios sabe por qué no fue árbitro internacional porque las condiciones y las capacidades las tenía”, concluyó Escobar.