El cortejo fúnebre de Pelé conmueve a su paso por la casa de su madre
Familiares del exfutbolista se asomaron al balcón para darle el último adiós.
El cortejo fúnebre de Pelé, que acompañan este martes miles de personas en la ciudad de Santos, pasó por delante de la casa de la madre del astro brasileño, Celeste Arantes, que en 2022 cumplió 100 años de edad, en el momento más emotivo de los funerales.
Familiares y amigos de Pelé, fallecido el jueves pasado a los 82 años de edad, vieron frente a sus ojos el féretro de 'O Rei' desde el balcón de la residencia de Arantes, situada en el Canal 6 de Santos, donde se concentraron cientos de personas.
Entre los parientes estaba la hermana de 'O Rei', Maria Lúcia Nascimento, visiblemente emocionada.
Los vecinos de Santos ocuparon los dos lados del canal para homenajear a su mayor ídolo y dar condolencias a la familia con cánticos del club donde Pelé pasó la mayor parte de su carrera deportiva.
Al paso del camión de bomberos que transportó los restos mortales del exfutbolista brasileño, hubo una explosión de aplausos y vítores, con gritos de "Pelé, Pelé, Pelé" y "1.000 goles, 1.000 goles, 1.000 goles". Banderolas gigantes ondeaban a ambos lados de la calle.
Los familiares, desde el balcón, en silencio, aunque en algún momento terminaron por unirse a los cánticos de la enfervorecida afición santista.
Luego entrelazaron las manos y rezaron mientras el camión pasaba justo por delante. El féretro iba escoltado por seis cadetes y dos bomberos.
"¡Viva o Rei!", gritaban unos desde la calle, mientras otros rezaban un Padre Nuestro, en medio de un calor sofocante.
En las ventanas de la casa de Arantes, los parientes y allegados colgaron una bandera de Brasil y otras dos con el rostro de 'O Rei'. El portón de la residencia también estaba cubierto por una bandera nacional.
El cortejo fúnebre está recorriendo este martes las calles de Santos, en un último adiós al eterno 10 de la Canarinha que ha sacado a las calles a miles de personas, a pesar de ser un día laborable.
Su última parada será el Memorial Necrópolis Ecuménica, donde será sepultado en la más estricta intimidad.
EFE