El Bayern Múnich pasó hoy como un huracán por encima del Borussia Dortmund en un partido que se saldó con una goleada de 6-0 y que hace que el equipo alemán viaje la próxima semana con la moral en alto para el partido de ida contra el Sevilla en cuartos de final de la Liga de Campeones.

Un triplete de Robert Lewandowski y una noche mágica de James Rodríguez fueron parte de las claves de una increíble demostración con la que el Bayern refrendó su hegemonía en la Bundesliga.

Para celebrar el título el Bayern tendrá que esperar a la próxima jornada debido a la victoria del Schalke ante el Friburgo, pero en todo caso los bávaros están sólo a un triunfo del alirón.

Los bávaros salieron con una alineación a la que muy probablemente se parecerá mucho la que utilice el martes contra el Sevilla. La única posición en la que un cambio es altamente probable es el lateral derecho donde hoy Jupp Heynckes le dio descanso a Joshua Kimmich y minutos al brasileño Rafinha.

En el centro del campo defensivo Javi Martínez y James Rodríguez formaron una pareja de lujo y el rendimiento de los dos hace bastante probable que se repita el experimento contra el Sevilla.

James, jugando retrasado, hizo un gran partido con un gol y dos asistencias para lo que sólo necesitó estar 65 minutos en el campo.

El primer gol llegó en el minuto 5, cuando Thomas Müller le metió un balón a Robert Lewandowski que, tras ganar el área, enfrentó al meta Roman Bürki y marcó con un remate de pierna derecha.

Ese fue el comienzo de una debacle para el Dortmund. En el 14 James hizo el segundo, tras recibir un centro de David Alaba desde la izquierda y en el 23, a centro de James, Müller hizo el tercero desde corta distancia.

La jugada del gol de Müller la había empezado el propio James con un robo de balón a Gonzalo Castro cerca de la raya central.

Después, el Bayern bajó un poco las revoluciones, el entrenador del Dortmund, Peter Stöger, trató de minimizar daños mandando al campo a Julian Weigl para sustituir a Castro.

Sin embargo, justo cuando parecía que la tormenta había amainado, apareció Franck Ribery, que en el minuto 44 se deshizo de su marcador Lucasz Piszcek y la pelota, tras un encontronazo del francés con Bürki, terminó suelta en el área pequeña desde donde Lewandoski marcó con la punta de la bota.

El quinto lo hizo Ribery, en el 45, tras una combinación con James. El partido ya estaba más que resuelto y el Bayern se dedicó sencillamente a controlar y a reservarse para los compromisos de la Liga de Campeones.

En el minuto 65 James, que había sido probablemente el mejor del partido, dejó el campo para darle paso a Thiago Alcántara. En el 68 Ribery salió por Sebastian Rudy.

En el 86 llegó el sexto. Kimmich ganó la raya de fondo tras asociarse con Müller y lanzó un centro al área pequeña ante el que Lewandowski sólo tuvo que poner el pie para marcar.

EFE