La reciente derrota ante Brasil por 1-0, no solo dejó a Colombia caminando al filo de la cornisa en la zona del repechaje, sino que la obliga a una victoria que solo podrá lograr si mejora su nivel y rompe un ayuno de goles que ha sostenido durante los recientes cuatro partidos. 

Con 16 puntos, Colombia se encuentra en un triple empate en la zona media de la tabla. En este momento está igualada con Chile, que la supera por mejor diferencia de gol, y está por encima de Uruguay, que al perder el duelo contra Argentina le dio un empujón a la escuadra tricolor. 

Decir que en Barranquilla hay que ganar no es novedad.

¿Desde cuando no es necesario ganar de local para alcanzar algún objetivo? Lo realmente importante es el cómo se va a lograr eso y cómo se pondría el panorama en caso de qué no pase. 

Lo primero que hay que decir es que luego de tres empates sin goles y una derrota por 1-0 pareciera que el problema no es de defensa. Ese fantasma de la goleada encajada hace un año ante Ecuador por 6-1 poco a poco ha ido quedando atrás. 

El tema es que Colombia poco propone en ataque.

Desde el triunfo por 3-1 ante Chile en el Metropolitano, al equipo no se le ha visto nuevamente esa facilidad para generar jugadas ofensivas. Es más, en el segundo tiempo ante Brasil no se hizo ni un solo tiro al arco. 

Es por eso que la primera decisión de Reinaldo Rueda es la de buscar un elenco ofensivo, ante una Paraguay que viene de una derrota y francamente, jugando bastante mal. 

Aquí es cuando se evalúa la posibilidad de volver a poner de laterales a Juan Guillermo Cuadrado y Yairo Moreno, como en el duelo que se le ganó a los australes. En la mitad, con la baja de Wilmar Barrios y Matheus Uribe, se debería incluir nombres más ofensivos como el barranquillero Gustavo Cuéllar y el magdalenense Víctor Cantillo. 

Arriba, la duda está disipada: Miguel Ángel Borja es el hombre de los goles y por más que haya sido impresionante su rendimiento en Italia, Duván Zapata no está brindando resultados en el ataque local. Al lado del goleador el laborioso Rafael Santos Borré ha venido complementando bien al cordobés.

El guajiro Luis Díaz es fijo e inamovible. Es, sin dudas, el mejor jugador de la actualidad colombiana e incluso goleador de no solo su equipo, sino de toda la liga de Portugal. 

Falta un jugador para que maneje las ideas y aunque en Sao Paulo quedó claro que está muy alejado de su mejor versión, si se trata de arriesgar, pues la apuesta sería a James Rodríguez. Es un todo o nada. 

Pero como dijimos en un inicio, ganar no basta. Colombia tendrá que salir a buscar los puntos mientras al tiempo tiene un ojo en las otras plazas a ver si entre tanto enfrentamiento directo sale beneficiado. 

Así por ejemplo, esperar que se den empates en choques de rivales en la tabla como Uruguay-Bolivia y Ecuador-Chile, así como que Venezuela se le atraviese en el camino a Perú. 

De esta manera, con un triunfo en el Metropolitano los de Rueda sí podrían cerrar el año con buenas noticias.

En caso contrario, el 2021 empezará con una enorme incertidumbre.