La selección de Colombia sorprendió este jueves a Chile en Santiago y le sacó un valioso empate a un gol en un partido de la tercera jornada de las eliminatorias del Mundial de Rusia 2018.

Chile, que había ganado sus compromisos de las dos primeras jornadas, ahora suma 7 puntos y Colombia, que venía de capa caída tras perder por goleada en la segunda ante Uruguay, ahora tiene 4.

El partido fue intenso, con un primer tiempo de dominio chileno, que se fue al descanso en ventaja con un tanto de cabeza de Arturo Vidal, y una notable reacción de los dirigidos de José Pekerman en la segunda mitad, cuando no sólo igualaron la cuenta con James Rodríguez, sino que adicionalmente destiñeron el juego de la Roja.

El primer tiempo llegaba a su fin y todo indicaba que la cuenta quedaría en blanco tras 45 minutos de predominio chileno, tanto en el control del terreno como del balón, pero sin que Colombia se viera realmente desbordada por el juego ofensivo de la Roja.

El portero David Ospina trabajó mucho pero sin situaciones realmente peligrosas, pues los campeones de América no estuvieron afortunados en el remate final, y varios tiros libres lanzados en la media distancia fenecieron en la bien colocada y espigada defensa cafetera.

Incluso fue el capitán Cladio Bravo el protagonista de la atajada más esforzada de la primera mitad, cuando en los 21 debió volar para desviar al córner un remate de Daniel Torres tras una jugada colectiva tejida entre Luis Fernando Muriel y Jackson Martínez.

Antes, en los 14, Arturo Vidal salvó a Chile de un percance al cortar en el piso un pase de James que iba directo a Jackson, que estaba sin marca.

El propio Vidal fue el que dio a Chile la ventaja cuando se cumplían los 45 minutos, al conectar de cabeza y encajar el balón en un rincón bajo del pórtico, anticipándose en el área chica a Zapata y Murillo, tras un tiro libre que Matías Fernández hizo caer llovido en la zona sagrada de Colombia.

En el segundo tiempo Chile perdió velocidad y el control del juego. Colombia se ordenó, Muriel, una de las figuras del partido, comenzó a trepar por su banda, Jackson se hizo más visible, y James dictó la cadencia de los cafeteros, que se animaron a merodear el área chilena.

El portero Bravo tuvo que trabajar más.

En los 68, un borbollón en el área chilena lleva a Muriel a servir el balón a James y el jugador del Real Madrid, tras una media vuelta, fijó el empate con un disparo colocado a un costado.

El gol le hizo mal a Chile y bien a Colombia.

El visitante se hizo del control y al local se le extravió la brújula durante más de diez minutos en los que no logró hilvanar una jugada ofensiva coherente.

Así quedó expuesto al contragolpe de un rival que tomó confianza.

Jorge Sampaoli buscó recuperar el camino enviando al campo a Fabián Orellana y Mauricio Pinilla por los apagados Jorge Valdivia y Eduardo Vargas, pero ya era demasiado tarde. La Roja había perdido la velocidad y la verticalidad de su juego.

El canto del cisne se dio antes de los cambios, cuando Vargas superó en velocidad a los defensas rivales pero no a Ospina que, atento, lo anticipó y envió el balón al córner.

En la zona local, Bravo salvo en doble instancia un bombazo de Edwin Cardona a los 86 minutos y sobre los 90 Carlos Bacca perdió su opción por no apuntarle al pórtico desde una buena posición.

En la cuarta jornada, que se jugará este martes, Chile visitará a Uruguay y Colombia recibirá a Argentina.

EFE