“Vengo a ganarles a todos y a ser campeón”, fueron las primeras palabras de Alfredo Arias a su llegada a Barranquilla, en la medianoche del 22 de junio, para asumir la dirección técnica del Junior en reemplazo del venezolano César Farías.

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Dos días después, el uruguayo fue presentado oficialmente como timonel rojiblanco por Fuad Char y su hijo Antonio, presidente del club y, ante ellos y los periodistas, ratificó lo que dijo a su llegada: “Vamos a entrenar como campeones, a vivir como campeones y a soñar como campeones”.

Fuad Char dijo en su presentación que la inteligencia artifical le había recomendado la contratación del timonel uruguayo.

Arias calificó como un “honor” haber sido contratado con Junior y un “orgullo” que se valorara su trabajo ya que venía de no ser campeón en su anterior club (Deportivo Cali).

“Trataré de ser campeón porque acá la obligación es ser campeón”, reiteró tras uno de sus primeros entrenamientos.

Arias cumplió su promesa y le dio al Junior la undécima estrella de su historia. También se quitó de encima una mochila grande y era que no había podido salir campeón en Colombia. Lo más cerca que había estado fue en el segundo semestre de 2023, cuando dirigía al Medellín, y perdió la final con Junior por penales. Sus detractores ya le habían acuñado el rótulo de “mufa”, recordando que tampoco había ganado nada con Cali y Santa Fe.

En Junior encontró las garantías necesarias para adelantar tranquilamente su trabajo. Pidió la contratación de dos jugadores uruguayos: el portero Mauro Silveira y el defensa central Lucas Monzón, quienes no comenzaron bien, pero terminaron siendo pilares del equipo que conquistó el título.

A pocos días de comenzar el campeonato perdió a Jordan Barrera, transferido al Botafogo de Brasil y dio el visto bueno para la continuidad de Teófilo Gutiérrez.

El arranque de Arias con Junior fue muy bueno. En las seis primeras fechas sumó 14 puntos de 18 posibles, producto de cuatro triunfos y dos empates, que catapultaron al equipo rojiblanco al liderato del todos contra todos.

Los problemas comenzaron cuando fue goleado 3–0 por el colero Millonarios, en la octava fecha, y se agudizaron al caer 3–1 en el clásico costeño ante el casi descendido Unión Magdalena.

En medio de la Liga se sumaron flojas presentaciones en la Copa Colombia ante equipos de la B: Huila y Atlético a los que eliminó en la tanda de penales.

Tras la derrota 2–0 ante Atlético, en Cali, el técnico dijo sentir una “inmensa vergüenza”.

Junior perdió el liderato en la fecha 14, tras caer 1–0 en casa con el Tolima, y no lo recuperó más. Se sacudió con dos victorias seguidas y complicadas sobre Alianza (1–0) y sobre el Pereira (3–2), esta última en tiempo de reposición con gol de ‘Titi’ Rodríguez, que el uruguayo se lo dedicó a la tribuna, que lo agitó durante todo el partido.

Después vino la eliminación de la Copa Colombia a manos del América y dos derrotas seguidas contra el mismo América y Santa Fe, en casa, que motivaron una reunión urgente en la residencia de Fuad Char.

Los altibajos de Junior le hicieron aplazar su clasificación a los cuadrangulares, la cual aseguró con el empate 1–1 con Fortaleza y la victoria 2–1 en casa sobre Nacional.

Junior terminó quinto en el todos contra todos con 35 puntos y el sorteo de los cuadrangulares lo ubicó en el ‘grupo de la muerte’ junto a Medellín, Nacional y América.

Sin embargo, a todos les ganó de local. Les empató de visitante a América y a Nacional y solo perdió con el DIM en la última fecha. Contra todos los pronósticos terminó primero con 11 puntos y logró el derecho a jugar la final contra el Tolima.

En la ida, con el triunfo 3–0, con doblete de José Enamorado, prácticamente liquidó la serie para coronarse campeón.

Sin duda, Alfredo Arias cumplió su promesa. Vino a Junior a ganarles a todos y salir campeón y lo logró.

Ya había salido campeón en su país con Montevideo Wanderers (2014) y Peñarol (2023) y en Ecuador con Emelec (2017), pero en Colombia el título le había sido esquivo con tres equipos.

Arias es el segundo técnico uruguayo que se corona campeón con Junior. El primero fue Julio Comesaña, quien ganó tres títulos de Liga (1993, 2018 y 2019), una Copa Colombia (2017) y una Superliga (2020).